“Fueron segundos sumamente violentos”, declaró mujer asaltada cuando salía de su trabajo
Los minutos más horrendos de su vida corresponden, según la víctima, al asalto que sufrió cuando salía de su trabajo, y que los revivió al prestar declaración frente a los jueces del Tribunal Oral.
En el banquillo de los acusados la Fiscalía tiene por estos días a Paula Figueroa Vera, Luis Cárdenas Díaz y Carlos Ojeda Chiguay. La fiscal Rina Blanco los llevó a juicio oral por “robo con violencia e intimidación”; y pide seis años de cárcel para cada uno.
Asalto
La víctima, de 50 años, fue asaltada saliendo de su trabajo, el 20 de mayo de 2021 pasadas las 21 horas, en los alrededores de la esquina de Magallanes con Maipú.
Ella esperaba que la pasaran a buscar en auto cuando se le acercan los sujetos que le roban el celular y la agraden. Salen escapando pero horas más tarde fueron detenidos por Carabineros.
Los antisociales se movilizaban en un vehículo Renault Symbol que estacionaron en las proximidades del lugar. Bajan la mujer y Luis Cárdenas. Mientras que el conductor, Carlos Ojeda Chiguay, los esperó a lo lejos.
Víctima
La víctima declaró en el juicio, pero pidió hacerlo tras un biombo, para no ver a sus asaltantes. Porque para ella está muy fresco el recuerdo de esa jornada, que terminó siendo la peor pesadilla de su vida, y terminó con 30 días de licencia y visitas hasta los días de hoy al psicólogo y psiquiatra.
Dio detalles de cómo la asaltaron. La arrinconaron contra la pared y luego cayó al suelo. Por más que trató de impedir que le robaran el celular igual se lo arrebataron.
“Me tapaba para que no me golpearan la cabeza”. Lo que más le llamó la atención, y que repitió varias veces, fue el grado de violencia con que actuó la joven, tanto para agredirla como insultarla. “A ella la encontré muy violenta”, reafirmó.
Clama justicia
Cuando la fiscal le preguntó por qué quería declarar en el juicio, respondió que para entregar su versión del robo que vivió y porque pide que se haga justicia.
“Los dos eran más altos que yo, y cuando me vi que estaba en esa situación sólo atiné a taparme, porque empezaron a golpearme y me empujaron contra la florería (en Maipú esquina Magallanes)”.
“Me insultaron y me pegaron mucho. Al parecer con algo duro en la cabeza, y yo me tapaba. Traté de que el joven no me robara el teléfono, mientras la chica me pegaba y amenazaba con matarme”.
“En un momento el joven me acorraló, me robó el celular y salió corriendo. Pensé que la chica en ese momento se iba a ir pero me siguió golpeando y fue una eternidad. Al esquivar uno de los golpes caí al suelo. Hasta una identificación que tenía me arrebataron”.
Afortunadamente para ella una señora de una casa más arriba salió y gritó dejen de golpearla. Ahí la chica se paró y se fue. Pero actuó con una violencia tremenda. Fueron segundos sumamente violentos”.
Plano emocional
En el plano emocional confesó encontrarse muy mal. “Cuesta mucho sobrellevar esto. Porque en un segundo es como que te quitan todo, y esto le perjudicó también a mi familia”, comentó.
Ante la pregunta de qué espera de este juicio. La respuesta fue una sola y muy escueta. “Que se haga justicia, porque si no me defiendo con todos los golpes que recibí hubiese terminado en otras condiciones”.