Cadi-Umag inicia investigaciones que apuntan al alto rendimiento de los deportistas de Magallanes

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ace una semana, Robinson Ariel Almonacid Zúñiga se tituló como campeón nacional de ciclismo en la modalidad contrarreloj. Pero quizás cuántos más galardones tendría si tuviera la posibilidad de medir distintas variables de su rendimiento. El deportista en Magallanes adolece de un trabajo científico que le permita desarrollar su potencial, deuda que el Cadi Umag ya comienza a asumir, para beneficio de la región.

En la Unidad Análisis Movimiento Humano del Centro de Neurofisiología Integrativa Molecular Austral Chilena, el fisiólogo Cristián Núñez Espinoza, comenzó a desarrollar un proyecto, financiado por el Instituto Nacional de Deportes, que permitirá someter a distintas mediciones a los deportistas, y Almonacid fue el primer invitado a probar los diferentes dispositivos.

“Una de las áreas de este grupo de investigación es ver cómo el deporte puede neuromodular a las personas, y una de esas áreas son los deportistas, que son de gran interés para nosotros poder ver cómo el ser deportista puede producir cambios nerviosos, cambios en la musculatura, corazón, todo a través del sistema nervioso, y que nosotros, a través de ciertas tipologías podemos favorecer al deportista. Para nosotros es una línea de investigación sumamente interesante y tuvimos la posibilidad de postular al Fondo de Ciencias del Deporte del IND, somos la única universidad estatal en Chile en adjudicarse un proyecto así”, partió destacando Núñez.

El inicio de estas mediciones será con ciclistas, con una población de estudio de al menos, treinta personas, de la cual la mitad será mujeres, para este año de ejecución. “Los deportistas podrán contar con medidas objetivas, fisiológicas, que sus entrenadores podrán traducir para aumentar la carga de entrenamiento, disminuirla y ver las condicionantes que pueden modificarse para mejorar el rendimiento y que puedan obtener mejores resultados. La invitación está abierta a todos los deportistas competitivos, es decir, que lleven más de un año de competencia y rigurosidad de su entrenamiento. Tienen que escribir a [email protected] o en las redes sociales @nimach_group en Instagram. Tendremos medidas nutricionales, antropométricas, test psicológicos y fisiológicos. Los ciclistas pueden ser hasta los 60 años y que sean mayores de edad”, puntualizó.

En el Cadi ya han hecho análisis en nadadores adolescentes, por lo que la idea del grupo es potenciar las investigaciones en deportistas de la región “y anticipo que por septiembre haremos un seminario de neurofisiología del deporte en el Cadi-Umag”. De hecho, la semana pasada se hizo una charla, pero dirigida a deportistas escolares, para que vayan familiarizándose con estas metodologías.

Los análisis de Ariel

El ciclista campeón se sometió a estudios de test psicológicos autorreportados, un análisis nutricional de pliegues y de In body, similar a un scanner. Posteriormente, fue el turno de los test fisiológicos, como el control autonómico-cardiaco, neuromusculares, posturometría (equilibrio) y la prueba de ejercicio máximo, el FTP, estándar en los ciclistas, una prueba anaeróbica de máxima intensidad, en que se determina cuál de los factores, tanto psicológicos, nutricionales y nerviosos, pueden influir en esa prueba.

Todos estos análisis no dejaron de sorprender a Robinson Ariel Almonacid, puesto que comenzó en el ciclismo “en el descenso, una disciplina que consiste en bajar cerros. Conocí a mi polola que comenzó a meterme en el mundo del mountain bike, XCO, XCM. Durante la pandemia, me enfoqué en la ruta, compré un rodillo de transmisión directa que me sirvió para entrenar, hasta que empecé a probarme en carreras de ruta. Y el 7 y 8 fue el campeonato nacional, que se aplazó una semana y yo me fui un mes antes a Santiago, que era primera vez que salía. Corrí cinco carreras y en todas tuve buenos desempeños y en el Nacional, hubo un día de contrarreloj en la que me coroné campeón y la prueba de fondo, en un circuito, llegué en el pelotón de punta”, resumió.

Considerando que todos estos resultados fueron sin contar con análisis como los que encontró en el Cadi, Almonacid se muestra muy esperanzado. “En otras regiones están mucho más avanzados y que se esté haciendo esto en la región es súper bueno, porque hay muchos talentos surgiendo y con bastante potencial. Primera vez que hago estas mediciones, más profundas y sirve mucho, porque puedes ir viendo qué mejorar”.

Posibilidad para
estudiantes

Este centro además, sirve para que estudiantes de kinesiología puedan tener sus primeras experiencias prácticas. Diego Mabe, de segundo año, fue uno de los que apoyó en estas mediciones. “Me parece genial que alumnos tengan la posibilidad de ver cómo se hacen estos estudios y aprender, porque en la investigación de pregrado no es tan común y hay que potenciarla, para que los estudiantes cuando salgan, sean capaces de investigar por su cuenta. Yo por ejemplo, soy deportista, practico badminton y nunca me había sometido a estos estudios, es beneficioso tanto para el estudiante como para el deportista”.