Semiserio de la política regional: el estreno simultáneo de malas películas con viejos actores
- Una semana de hechos que, sin el glamour de Hollywood y con actores que creíamos retirados, nos traen reminiscencias a pollos perdidos en el vertedero y a corderos comercializados a lo negro.
Movida, por decir lo menos, ha sido la cartelera de la política esta semana. A nivel nacional, el Presidente comenzó a desligarse del resultado del plebiscito constitucional, lo que, para algunos, resultó una mala película y, para otros, una necesaria precuela que dé sentido a todo lo que podría venir.
En nuestro terruño, llegó a su punto de inflexión la pugna en un colegio municipalizado y, en el plano político-electoral, asistimos al regreso a escena de un viejo hombre de las tablas del radicalismo.
¿Puntos en común? Viejos actores que por décadas han dominado la pantalla grande de la vida magallánica y que, en algunos casos, creíamos retirados.
Cual coronavirus y otras enfermedades provenientes de los animales, del pasado nos ataca una suerte de zoonosis de la política regional. ¿Un lugar común? El vertedero de Punta Arenas.
Así, todo parece un déjà-vu, donde resurgen historias y/o mitos urbanos sobre los pollos que se perdieron y la venta sin emitir boleta de una partida de corderos que, al igual que sus amigos alados, tuvieron como set común el citado botadero municipal.
(Después no se quejen de que se dice que la política es sucia o que algo huele mal…).
Viejas prácticas, viejos personajes que, cual actor de Hollywood que no ha ganado ni un Oscar, se resisten a abandonar el mundo de los rodajes.
Ciertamente, vamos a intentar comentar estas películas de bajo presupuesto que, sin la genialidad de un Scorsese ni un Spielberg ni un Tarantino, han tenido un estreno simultáneo esta semana.
Contaremos tres historias, pero recurriremos al cine italiano, por eso de la genialidad cruzada con el particular sentido de humor que tienen de la vida.
Bajo el influjo del Spaghetti Western y, pidiendo excusas sentidas al director Sergio Leone, nos ilustraremos con la ‘Triología del dólar’, también conocida como la ‘Triología del hombre sin nombre’.
En esta adaptación, la primera película llamada “Por un puñado de dólares” será promocionada como “Por un puñado de pollos” y el segundo filme, “La muerte tenía un precio”, se titulará “El cordero tenía un precio”.
Luz, cámara, acción…
Se prenden los reflectores y, así, cual vaquero de un Western, con sombrero alado, reaparece… ¡Pepe Auth!
En Magallanes, una ametralladora dispara por doquier. Como balas inmisericordes, acusaciones van y vienen. El director pide un close up: sin sombrero y sin revólver del oeste, pero letalmente armado, entra Julián Mancilla.
En otro guión, se habla de la elección del Partido Radical. En dos comunicados de prensa se insiste en dar a conocer sólo a uno de los postulantes a la presidencia criolla hasta que, detrás de bambalinas, sale él. La cámara apunta directo al rostro de… ¡Alfredo Miranda! Entrada épica, sólo comparable a la de Han Solo subiendo con Chewbacca al Halcón Milenario en Star Wars Episodio VII: El Despertar de la Fuerza. Ni el cineasta George Lucas en las sagas emblemáticas de esta franquicia podría haber hecho algo más conmovedor.
“Esto camina hacia una
derrota del Apruebo”
Faltando diez semanas para el 4 de septiembre, el experto electoral Pepe Auth se toma la pantalla al más puro estilo del vagabundo rebelde Johnny King en la película “Uno más al infierno”.
Y, como si fuera John Wesley Hardin, considerado por muchos el pistolero más rápido de la historia, Auth desenfunda y dispara: “Esto camina hacia una derrota del Apruebo”. Una bala letal que genera un gran impacto en La Moneda, a sólo horas de que el ministro Giorgio Jackson diera una entrevista a El Mercurio, aseverando: “Si gana el Rechazo, muchas de nuestras reformas no se podrían llevar adelante”. Esto pone en apuro a los guionistas del gobierno, por lo que rápidamente el propio Presidente Boric debe cruzar las puertas batientes del típico “saloon”, pararse al medio de la calle empolvada y encarar al destino, señalando que su programa “no es algo que esté sujeto al resultado del plebiscito”.
Rango: “Ningún
hombre puede huir de
su propia historia”
En la escena local y quizás parodiando a película animada Rango, el antagonista pretende ser el bueno, quiere forzar a todo un pueblo a irse, robándole el agua. Así, nuestro Julián Mancilla encabeza una revuelta en contra de la directora de un establecimiento que acaba de ganar un concurso por Alta Dirección Pública.
En este rodaje, el villano no es alcalde como en Rango y no hay vacas siendo arriadas por rudos vaqueros. Pero, trae el recuerdo de un episodio freak, cuando Mancilla era concejal y vendió un centenar de corderos sin emitir boleta a profesores, asistentes de la educación y personas naturales. Al sufrir la descomposición, su mercancía terminó en el vertedero.
Quizás, como se le dice a Rango, la moraleja es: “Ningún hombre puede huir de su propia historia”.
“Por un puñado
de dólares”
Inolvidable. “Por un puñado de dólares” es la historia de un pueblo donde se apodera el caos, dejando como si fuera cosa de niños lo de los autos roncadores y la violencia callejera de Punta Arenas.
Dos familias se disputan el control al igual que en estas elecciones del PR regional, donde dos candidatos compitieron por quedarse con la presidencia del radicalismo. En este rodaje sorprendió la reaparición de un mítico de la política regional: Alfredo “Repollo” Miranda. Otrora hombre fuerte del radicalismo, se cuenta que, cuando quería zanjar nombramientos y siendo fiel a la tradición radical de la buena mesa, partía con un par de corderos en la maleta a negociar con los jerarcas de su partido al norte del país.
Hombre de múltiples cargos públicos, creíamos que estaba disfrutando de la vida de un actor retirado. Pero, no.
En esta reaparición no podemos dejar de recordar aquel capítulo de la historia regional de los pollos que se perdieron en el vertedero. Era un 14 de abril de 1994, cuando desapareció un cargamento de seis mil kilos de pollos en estado de descomposición que fue llevado al vertedero. ¿Qué pasó con los pollos? Nunca se supo.
Volviendo a nuestra filmación, lo único que lamentamos es que ninguno de los candidatos del PR tenga la belleza del actor Clint Eastwood, que interpreta al misterioso forastero en la referida película que sentó las bases del Spaghetti Western.
“Il buono, il brutto,
il cattivo”
La ‘Triología del dólar’ cierra con un clásico: “Il buono, il brutto, il cattivo”. (traducción: El bueno, el feo y el malo). A esta última película de la saga le mantendremos el título, so riesgo de que venga la demanda de derechos intelectuales.
Serán los lectores de nuestros mediocres guiones locales y filmes de bajo presupuesto los que tendrán la tarea de identificar quién de estos tres personajes es el bueno -si lo hay-, quién es el malo y quién es… el feo.