“Será un pastor cercano, con olor a oveja”, dijo feligresa al término de la misa que ofició obispo electo de Magallanes
Con un aplauso cerrado la comunidad religiosa Padre Alberto Hurtado, de la población Pablo Neruda, le dio la bienvenida anoche al obispo electo de Magallanes, Oscar Blanco Martínez, quien cumple una visita de carácter “privada”, como antesala de lo que será su asunción el próximo 10 de septiembre.
Por lo mismo se excusó de entregar declaraciones a La Prensa Austral, hasta después de asumir el cargo que puso en sus manos el Papa Francisco.
Ayer al mediodía sostuvo una reunión con el ahora administrador apostólico de Magallanes, Bernardo Bastres y con parte del clero local.
La segunda actividad fue asistir en la tarde a la eucaristía en el Día de la Solidaridad, en la Comunidad Padre Alberto Hurtado, que está cumpliendo 30 años de actividad ininterrumpida.
“Es un gusto tremendo estar celebrando hoy (ayer) la eucaristía con todos ustedes”, dijo el actual obispo de Calama, Oscar Blanco.
Luego entregó un mensaje inspirado en la labor que cumplió en este mundo el “padre San Alberto Hurtado”. Un hombre inspirador del amor de Dios, “que vivió en clave de amor, que no sólo lo predicó y rezó, sino que lo hizo carne y vida”.
Hablar de solidaridad no es sólo hacer una obra buena o celebrar un mes, sino que asistir permanentemente a los más necesitados.
Comunidad
Al término de la misa los fieles coincidieron en manifestar su agradecimiento por la visita del futuro obispo de Magallanes. Lo encontraron una persona muy cercana y sencilla.
“Para nosotros es una bendición que llegara a nuestra comunidad”, dijo Rosita Oyarzún.
Mientras que María Leviñanco Leviñanco dijo que la llegada del sacerdote fue tremendamente importante “porque le dio mayor realce a la celebración de los treinta años de nuestra comunidad. Y por lo que acabo de ver, estoy segura que será un pastor cercano, con olor a oveja, que es lo que queremos todos nosotros”.
El coordinador general de esta comunidad, Jonathan Oyarzún González, señaló que “fue muy gratificante de tenerlo en nuestra casa, sobre todo en nuestro aniversario. Es muy valioso el gesto que tuvo porque aún no asume oficialmente y ya tuvimos la dicha de tenerlo con nosotros”.
