Déficit hídrico en Magallanes: las mediciones en las siete estaciones meteorológicas arrojan desde -8,8% hasta -58%
“Sabemos que la producción de carne y lana guarda relación con las condiciones climáticas pues es el agua que entrega el invierno por la nieve y las lluvias las que permiten contar con la disponibilidad de fuentes de agua permanentes para los animales, un requerimiento clave”
La secretaria regional ministerial de Agricultura, Irene Ramírez, bióloga de profesión, planteó que el trabajo de la comisión de Gestión Integral de Riesgos Agroclimáticos (Gir), es una valiosa instancia para que los directivos de los servicios del agro como Indap, Inia, Sag y Conaf colaboren con sus apreciaciones respecto de los reportes mensuales que entrega la red agro meteorológica del Ministerio de Agricultura.
El informe de análisis de riesgos agroclimáticos del mes de noviembre, contiene el registro de siete estaciones meteorológicas distribuidas en la región, permitiendo observar un déficit hídrico en la mayoría de las estaciones. Este déficit va desde un -8,8% en la estación ubicada en Estancia Zenia en Tierra del Fuego a un -58% en Kampenaike comuna de Laguna Blanca, seguido por la comuna de Torres del Paine que presenta un déficit de un -45,3%. En las demás estaciones, el déficit hídrico es de aproximadamente un -30%, donde la estación de Punta Arenas Rural destaca un déficit de un -38 de pluviometría acumulada en el presente año 2022.
Dicho déficit hídrico se observa más pronunciado y sostenido al analizar el índice vegetacional donde se aprecia que todas las comunas han bajado su cobertura vegetal, siendo las más afectadas las comunas de San Gregorio, Primavera, Laguna Blanca, Porvenir y Torres del Paine en rangos que van desde desfavorables-severos a desfavorables-leve.
En una de las actas de la comisión Gir se concluye “que existe un déficit hídrico, que requiere seguimiento y se observa que a partir de 2015 se produce un cambio en las condiciones climáticas en toda la región y junto con ello se genera una baja general en las precipitaciones en diferentes áreas de la región con cambios y frecuencias en los vientos con eventos más frecuentes de vientos sur-oeste y temporales de viento en invierno disminuyendo la precipitación nival”.
Así las cosas, para la seremi de Agricultura, es necesario ser previsor y asegurar agua para los sistemas productivos antes que se agudice la tendencia de déficit hídrico. Explica que, uno de nuestros lineamientos como ministerio es el agua, su uso racional y eficiente, junto con la perforación de pozos, aguadas, acumuladores como estanques y guateros, todas fórmulas que permitan acopiar el recurso vital para la producción de alimentos a través de la tecnificación del riego que es un trabajo que realiza Indap y la Comisión Nacional de Riego (CNR).
Al respecto, la jefa del Agro en Magallanes indicó que a través del programa de suelos SIRSD-S Sag Magallanes hemos orientado recursos en los tres últimos concursos temporada 2022 con los planes de manejo seleccionados y aún en ejecución, bonificándose: 41 aguadas superficiales, 18 pozos profundos, 35 estanques plásticos y 22 mil mts. de mangueras lo que da un total de una inversión de $161.295.140. Así también destacó el trabajo de los pequeños ganaderos que aprovechan las herramientas que ofrece Indap para mejorar las praderas y asegurar el alimento de los ovinos para los inviernos y primaveras difíciles. Incluso con la posibilidad de vender los excedentes.
Incorporación de tecnología
“Estamos optimistas por el interés que los productores tienen por incorporar tecnología y modernizar sus sistemas productivos con buenas prácticas amigables con el medio ambiente, como el uso de paneles solares, acumuladores de agua lluvia y otras iniciativas que contribuyen a ser resiliente al cambio climático y los desafíos ambientales. “Sabemos que la producción de carne y lana guarda relación con las condiciones climáticas pues es el agua que entrega el invierno por la nieve y las lluvias las que permiten contar con la disponibilidad de fuentes de agua permanentes para los animales, un requerimiento clave, al igual que obras adecuadas para permitir el almacenamiento de agua, garantizando el acceso a este importante recurso durante los periodos de mayor demanda principalmente, diciembre, enero y febrero donde se observa una importante disminución de pluviometría”.
Puntualizó que en la región se presenta en general con muy baja precipitación y ello es una alarma para los sistemas ganaderos de la región austral, pues se mantiene el déficit hídrico que ya se venía observando y que afecta el crecimiento anual del pastizal, base de la producción ganadera extensiva de Magallanes.
En este contexto, Irene Ramírez mencionó la pronta presentación de un libro denominado “Manual de adaptación al cambio climático para el sector productivo en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena” que ha sido elaborado por profesionales del Inia para apoyar a las y los productores agrícolas y ganaderos en este proceso.
“El trabajo colaborativo y el fortalecimiento de las organizaciones las vemos como un camino para superar las dificultades, no sólo para superar el cambio climático, sino también la incertidumbre de los mercados internacionales ante el alza de precios de insumos agrícolas. En este sentido, la autoridad del Agro destacó las conversaciones que han sostenido con las asociaciones de ganaderos de Tierra del Fuego y Asogama y también con productores agrícolas a través del Consejo Asesor Regional (Car) de Indap, actualmente estamos levantando información a través de una encuesta dirigida al sector ganadero para conocer su opinión respecto de cómo se está evidenciando el déficit hídrico en sus campos”, concluyó la seremi.