Buscan rescatar ex retén de Carabineros de Puerto Navarino, construido en 1929 por el croata Jerónimo Serka
“Estamos en un momento clave para poder tomar decisiones y hacer definiciones en relación a cuál va a ser ese uso nuevo que se le va a asignar”
Vacía y fría ha lucido por más de treinta años una obra arquitectónica a escasos metros de la Alcaldía de Mar de Puerto Navarino. Es un antiguo inmueble que testimonia el paso del tiempo y de lo que algún día se pensó para esta localidad ubicada a 54 kilómetros al noroeste de Puerto Williams.
Ventanas rotas, antiquísimos diarios usados como papeles murales a punto de desprenderse, crecientes arbustos que dificultan el ingreso por la puerta de entrada y residuos de lana de oveja en su entretecho, son parte de este inmueble que, pese al transcurso del tiempo, pareciera cobrar vida por sí mismo a su propia manera.
Hablamos del ex Retén de Carabineros, construido en 1929 por el croata Jerónimo Serka y usado para este fin hasta principios de la década de los 90. La edificación es el objetivo central de una investigación llevada a cabo por la arquitecta Pilar Fernández, quien durante la última semana presentó a la comunidad de Puerto Williams el cierre de su proyecto de documentación y levantamiento arquitectónico, financiado por el Fondo del Patrimonio Cultural, Convocatoria 2020, del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Según la también académica del Departamento de Arquitectura de la Universidad de Magallanes, la elección del lugar para el hoy extinto recinto policial no fue al azar. La profesional dice que en Puerto Navarino “hubo planes iniciales de poder fundar un centro administrativo, un centro cívico, en lo que era Liwaia. Hoy día vemos algunos vestigios y testimonios de ese plan fundacional y de esa población denominada Puerto Navarino que se proyectó, en donde se tenían previstas distintas edificaciones que pudieran funcionar como servicios públicos disponibles para apoyar a los colonos que en ese momento habían desarrollado ya una vida de estancia y que necesitaban también de cierta asistencia por parte del Estado en un lugar lejano, aislado”, sostiene.
Actualmente, el abandonado inmueble pertenece al Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) de Magallanes y Antártica Chile, y es de los pocos vestigios, junto a la Alcaldía de Mar -que entonces era conocida como Subdelegación-, de un antiguo anhelo del Estado por ejercer soberanía en esta zona aislada, extrema y fronteriza, donde incluiría instituciones como posta, correos, escuela y aduana.
Y aunque el estado de conservación actual del inmueble es crítico en ciertas áreas, la profesional asegura que una de las principales conclusiones de su estudio es que aún se puede restaurar y recuperar espacios significativos. “Al día de hoy es posible su restauración, es posible su puesta en valor y es posible poder asignar un nuevo uso que sea pertinente y compatible con las características del inmueble y con las características del lugar, por lo tanto, estamos en un momento clave para poder tomar decisiones y hacer definiciones en relación a cuál va a ser ese uso nuevo que se le va a asignar”, manifiesta.
“Si esto, efectivamente, por parte de la comunidad se desea, puede ser declarado como Monumento Histórico, por ejemplo, o alguna otra figura que corresponda al Consejo de Monumentos Nacionales o a la Ley de Monumentos. Y adicionalmente se espera que la comunidad participe de estas decisiones, los distintos sectores pueden estar involucrados. Los distintos servicios que tienen relación con el inmueble y Puerto Navarino, pueden avanzar en ciertas discusiones que permitan una toma de decisiones ojalá en un corto plazo”, añade.
La delegada presidencial provincial de la Antártica Chilena, María Luisa Muñoz, quien estuvo presente en la actividad de cierre realizada en dependencias de la Superintendencia de Bomberos de Puerto Williams, coincide con Fernández. “En Puerto Navarino hay una proyección, una rampa que se está construyendo, un punto de conexión con Tierra del Fuego. También es un puerto habilitado marítimo internacional, que tiene conexión con Ushuaia, que también es parte de la historia. Hay toda una oportunidad de levantar este futuro proyecto y ver cómo hacerlo de la mejor forma. Como puerta de entrada a Puerto Williams, a la Provincia Antártica, creo que hay que darle la importancia que se debe y recuperar este espacio”, menciona.
Arquitecta: “Hubo varios intentos
fundacionales en Navarino”
La investigación de la arquitecta Pilar Fernández arrojó que “hubo varios intentos fundacionales. Uno de ellos fue Puerto Toro en 1892. En el caso de Puerto Navarino, parte de la literatura mencionaba, por ejemplo, la falta de condiciones medioambientales disponibles para poder dotar a una población, como por ejemplo la falta de agua. También se requería de un punto quizás más equidistante entre Puerto Navarino y Puerto Toro, por lo tanto esto se empieza a desplazar y se empiezan a ubicar otros puntos de relevancia, como por ejemplo, Puerto Luisa, que al día de hoy conocemos como Puerto Williams”.
– ¿Cuál es la importancia hoy de Puerto Navarino?
– “Al día de hoy hay varios planes y proyectos que se están pensando para modernizar Puerto Navarino, para dotarlo de nueva infraestructura, como por ejemplo esta nueva rampa que se está haciendo para recibir a ciertas embarcaciones tipo ferri. Adicionalmente a eso, hay que pensar en una actividad que ha sido relevante: el intercambio entre territorio chileno y territorio argentino. Hay una actividad marítima importante que hasta el día de hoy todavía se mantiene. Y adicionalmente, estos edificios que dan cuenta de una historia y además de una relación entre distintos grupos y comunidades que habitaron en este lugar. Podemos ver también vestigios de conchales y de sitios arqueológicos que tienen una relevancia y que efectivamente aportan a esta idea de un valor conjunto”.