Circo Mágico se ilusiona con aparecer en otros sectores de Punta Arenas y cerrar gira en Porvenir y Natales
Ya son varios los días que el Circo Mágico lleva entregando entretención en estos veraniegos días. Y aunque al principio, la carpa que levantaron a un costado del gimnasio de la Confederación Deportiva sufrió con los rigores del viento magallánico, con el correr de las jornadas han podido concentrarse en brindar mágicos espectáculos para toda la familia. Mágico, porque es la ilusión la base del show, que se extiende por casi dos horas, y que durante este fin de semana los tendrá, nuevamente, con dos funciones por día.
El número estelar está a cargo del mago Calvin Clark, que 41 de sus 71 años los ha dedicado al ilusionismo. “Empecé como aficionado en Caracas, Venezuela, porque primero fui trapecista, estudié arte y teatro. Siempre he estado fuera de Chile, después del 73 y llegué de vuelta hace tres años. Fui malabarista, clown, del 88 al 93 y desde ese año inicié la magia en Argentina, porque ellos tienen 27 campeones mundiales de magia. En 1997 salió campeón mundial Carlos Barragán, de grandes ilusiones, que es lo que hago yo en el circo”, adelantó.
Las grandes ilusiones -explica- es de gran impacto visual, apreciable desde distintos sectores, “con elementos mágicos de la nueva generación, el acompañamiento de las chicas, que le dan el toque de belleza al espectáculo. Siempre nos estamos renovando, yo empecé con cosas muy pequeñas y, de hecho, cuando termino, siempre muestro el primer efecto que hice, en 1978 y la gente lo disfruta igual. En Chile no hay gran cantidad de magos, casi todos son de fiestas infantiles, porque el tema de la magia grande hay que invertir mucho, yo ando con tres mil kilos de magia”, reveló Calvin Clark, al igual que algunos de sus trucos, que incluyen levitaciones, suspensiones, multiplicaciones”.
De su amplia trayectoria, destaca sus inicios en 1968 con el Circo Sudamericano, de la familia Cárdenas-Aguirre, “que venía mucho a Magallanes. Vine como payaso ‘Cuchín’ y acróbata en ese entonces. Trabajé en cuatro, cinco circos peruanos, me fui a Ecuador, trabajé en Colombia, Venezuela, Centroamérica; la vida de uno es itinerante”.
No todo es magia, sino que ésta se fusiona con el resto de los atractivos del circo. Por ejemplo, Claudia Morales Espinoza es acróbata aérea, “y lo que intentamos es que no salga caminando, sino que aparezca mágicamente”, indica el mago, a lo que ella agrega que “aprendí por ahí por 2005 y desde 2010 me dedico a fusionar el circo y el teatro. Es primera vez que estoy en un circo tradicional”, destaca. Otra de las bailarinas es Diana Villarreal, de Colombia. “Entré a los 17 años al circo y ahora tengo 28.
Respecto de la recepción de la gente de Magallanes, destacan el cariño del público. “Varía considerablemente con la gente del norte, es muy amable, guarda todavía esa ternura que vi cuando vine por primera vez”, declaró, mientras se incorporan a la conversación Jorge Carte, que representa al payaso “Puntito”, y seis bailarinas: Nadia Carte, Escarlet Ramírez, Adriana Carte e Isidora Calderón. En total, el staff está compuesto de veinte personas.
El circo tiene funciones de martes a viernes a las 20,30 horas, mientras que hoy y mañana, habrá presentaciones a las 18,30 y 20,30 horas. Las entradas son de 10 y 15 mil pesos (niños menores de 5 años no pagan). El circo estará hasta fin de mes, para de ahí ver posibilidades de visitar Porvenir y Puerto Natales. También se analiza la posibilidad de trasladar la carpa a otro sector de Punta Arenas, para descentralizar este show.