Turismo, una recuperación que dista a los niveles prepandemia

La Organización Mundial de Turismo informó que el número de turistas extranjeros se duplicó en el mundo durante el año pasado. No obstante, aún no se ha recuperado el nivel del año 2019. 

En el caso americano, la recuperación se situó en un 65% y se espera que este año las llegadas de turistas internacionales se sitúen entre un 80% a un 95% respecto de los niveles prepandémicos.

Obviamente, estas proyecciones dependen de una serie de factores, entre ellos que se produzca una ralentización económica, el ritmo de recuperación de los viajes de Asia y el Pacífico y la evolución de la guerra en Ucrania.

A nivel nacional, se registraron 2 millones 30 mil 479 llegadas de turistas extranjeros durante el año 2022, lo que significó una variación interanual de 968,5%. Se logró también una tasa de ocupación en habitaciones de 43,1% en noviembre pasado, con un 5,08% de incremento comparado con el mismo mes de 2021.

En Magallanes, las cifras del turismo también repuntaron el año pasado. En términos de llegadas de pasajeros a la región, se registraron 158 mil 327 ingresos por pasos fronterizos versus los 4 mil 270 de 2021 (variación interanual de 3.607,9%). En tanto, hubo 514 mil 130 arribos por vía aérea contra las 302 mil 182 del 2021 (70,1% de incremento) y 20 mil 670 pasajeros ingresaron por vía marítima, lo que implicó un aumento de 490,1% respecto de los 3 mil 503 que llegaron por esta modalidad en 2021.

Al analizar las variaciones registradas en estos movimientos en los últimos años más allá de la pandemia, se aprecia cómo el factor de seguridad pesa a la hora de programar o cancelar un viaje. De hecho, en el caso magallánico hubo mermas ante episodios como el estallido social de 2019.

La seguridad también se relaciona con otros fenómenos como los incendios forestales que han afectado a parques y reservas nacionales.

Por ello, ante la ola de calor que está sufriendo el país y también a nuestra zona se deben extremar las medidas de resguardo al interior de las principales áreas silvestres protegidas.

Cuidar la estabilidad económica y contener los conflictos sociales, así como proteger nuestra biodiversidad y mantener un sistema de alerta y prevención de incendios forestales se presentan hoy como factores que tienen que ser considerados si se quiere recuperar los niveles de actividad turística prepandemia.