Simce: resultados regionales (II)

El calificado como “Simce de la pandemia” tuvo visos de letalidad al igual que el coronavirus. Tras cuatro años en que la medición censal no se había aplicado, el miércoles la Agencia de la Calidad de la Educación entregó los resultados de los test aplicados en 2022.

A nivel nacional, los cuartos básicos sólo promediaron 250 puntos en Matemáticas, diez puntos menos que en 2018. Pero, esto representa, además, un retroceso de una década, ya que se homologa a los resultados obtenidos en… ¡2012!

De 37% a 45% aumentó la proporción de estudiantes que quedó en el nivel de “insuficiente”, o sea, que “no logró demostrar conscientemente que ha adquirido habilidades y conocimientos elementales”.

En segundo medio, también a nivel nacional, los estudiantes lograron 252 puntos en Matemáticas, doce menos que en la medición de 2018. Cabe remarcar que este desempeño fue igual al registrado en 2006. 

De 46% a 54%, en tanto, se incrementó el porcentaje de alumnos con nivel “insuficiente”, mientras que, en general, el 82% de los escolares no dominó los contenidos esperados.

Alarmantes, evidentemente malos, preocupantes. Así fueron definidos estos resultados, los que tuvieron su propia expresión en Magallanes. Mientras los resultados de los alumnos de cuarto básico en Matemáticas disminuyeron tres puntos respecto de 2018, el 43% de los alumnos se enmarcó en el nivel “insuficiente”, el 38% en el elemental” y sólo el 19% demostró conocimientos adecuados. 

En segundo medio, la baja fue de doce puntos en comparación con 2018, quedando el 55% de los estudiantes en el nivel “insuficiente”, el 30% en el “elemental” y sólo el 15% en el estándar.

Bajas menos ostensibles, pero igualmente preocupantes se registraron en Lenguaje, pues resulta inconcebible que, con todo el énfasis que se puso en esta materia, el 50% de los estudiantes esté en un nivel “insuficiente” en lectura en segundo medio.

Aunque en la mayoría de los casos los promedios regionales fueron mejores que los nacionales, ello no debe equivocar el análisis ni morigerar la preocupación que los representantes en Magallanes de la Agencia de Calidad de la Educación y del ministerio del ramo deben tener. 

Al contrario, nunca se debe perder de vista que somos una región perfectamente abordable desde la perspectiva demográfica, con una población que apenas puede ser comparada con una de las comunas más pequeñas de la capital. Existen recursos financieros y también capacidad humana para que en los establecimientos se refuercen y/o corrijan las metodologías aplicadas y se afiancen los aprendizajes. 

Por eso, pareció demasiado complaciente el análisis entregado por el seremi del ramo. También cabe indicar que, desde el principal sostenedor de la enseñanza, como es la Cormupa no se aprecian esfuerzos ciertos por bajar los niveles de ausentismo y deserción escolar, acrecentados post-pandemia.