Justicia puso fin al accidente de familia argentina donde fallecieron dos personas
A casi tres meses del accidente que cobró la vida de dos personas de nacionalidad argentina, cuando viajaban desde Río Gallegos a Punta Arenas, ayer compareció vía remota, ante el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, el chofer y principal imputado, Franco Andrés Miranda.
La audiencia tenía por objeto zanjar su situación judicial.
La Fiscalía le ofreció una “suspensión condicional”, entendiendo que fue un lamentable accidente, donde no hubo ingesta de alcohol ni drogas, pero sí presencia de escarcha en la vía.
Aunque el informe preliminar de la Siat siempre apuntó a que el conductor manejaba a “velocidad no razonable ni prudente” y que, además, lo hacía sin licencia de conducir, como lo indicó el fiscal Felipe Aguirre cuando lo formalizó por un “cuasidelito de homicidio”.
Accidente
Eran cinco las personas que ese 22 de abril viajaban en un vehículo particular desde Río Gallegos a Punta Arenas, cuando cerca de las 13,30 horas volcaron violentamente en el sector de Laguna Seca, donde enfrentaron una curva, producto de que Miranda perdió el control.
Dos personas salieron eyectadas, y que fueron las que terminaron fallecidas producto de las graves heridas. Una era Gabriela Martínez Rodríguez, de 40 años, y Manuel Miranda, de 69. Eran suegro y nuera.
El deceso de la mujer enlutó a la policía de Río Gallegos, donde trabajaba y tenía el grado de sargento y estaba a cargo de la custodia de la gobernadora Alicia Kirchner.
Los otros tres ocupantes quedaron atrapados en el interior. Entre ellos el conductor, quien resultó ileso, su hijo de 19 años y una mujer. Estos dos últimos heridos graves.
“Le puede pasar
a cualquiera”
En la audiencia de ayer compareció como una de las víctimas el hijo del conductor y nieto del hombre fallecido, Franco Santiago Joaquín Miranda, quien a través del fiscal Marcelo Figueroa expresó sentirse conforme con esta salida judicial, porque además del tremendo dolor que esto le produjo a la familia, “entiende que se trató de un lamentable accidente que le puede ocurrir a cualquiera y por ende no tiene mayores reparos a la suspensión condicional”.
La jueza Mónica Mancilla le explicó al conductor que por dos años no puede incurrir en ningún otro tipo de delito. Además de fijar un domicilio en Punta Arenas, que en este caso es el de calle Carrera Nº441, donde funciona la Defensoría Penal Pública.
Fiscal
Marcelo Figueroa dijo al término de la audiencia que la Fiscalía investigó el accidente, analizó el informe de autopsia, la alcoholemia y el informe de la Siat, “pero no se logró establecer un dolo, se trata de un cuasidelito de gravísimas consecuencias, pero sin droga y alcohol de por medio”.
A partir de esto surge esta salida alternativa, indicó.
Además la jueza ordenó la devolución de la caución solicitada el día de la formalización para que Miranda pudiera abandonar el país de $300 mil.