La alegría y el entusiasmo de los niños y niñas iluminaron las jornadas de los Cevas
Más de 300 menores de edad participaron de las diferentes instancias de aprendizaje y recreación en los Centros de Vacaciones, jornadas que se realizaron desde el lunes 10 al viernes 14 de julio en varias parroquias de Punta Arenas.
Fueron más de 300 los niños y niñas que aceptaron la invitación para vivir un momento de alegría, juegos y encuentro, de una nueva versión de los Centros de Vacaciones (Cevas) de invierno, jornadas que se llevaron a cabo entre el lunes 10 y el viernes 14 de julio. Los Cevas 2023 estuvieron a cargo de 133 jóvenes monitores y 20 coordinadores.
Ariel Pizarro Silva, cordinador en la parroquia San Miguel, comentó que trabajaron con niños de cinco y hasta los doce años. Ellos estuvieron a cargo de monitores que fueron preparados con anticipación para esta actividad.
En tanto, la cordinadora general en el Santuario Jesús Nazareno, Constanza Andrade Aguila, dijo que trabajaron con niños desde los seis años y hasta los trece, y en cada jornada llegaron más de 30 menores. Ellos trabajaron con 16 monitores, de 14 años en adelante y el trabajo se desarrolló de acuerdo a la edad de los niños. “Realizamos juegos, dinámicas, manualidades… La verdad es que intentamos hacer varias actividades, durante todos los días, trabajando distintos valores”, explicó.
La asesora de diocesana de Cevas, Cecilia Gómez, ilustra que la idea de los Cevas se gestó a inicios de los años setenta en el seno de la parroquia Nuestra Señora de Fátima, cuando era párroco de esa sede el sacerdote magallánico Alejandro Goic Karmelic, posteriormente obispo de Rancagua entre los años 2014 y 2018.
“Nosotros llevamos un trabajo de 52 años de manera ininterrumpida, en distintas parroquias de Punta Arenas y también hemos trabajado en Porvenir y en su tiempo estuvo en Puerto Williams. En la Región de Magallanes nos falta llegar a Natales, que es un proyecto que queremos implementar para la provincia de Ultima Esperanza”, indicó Cecilia Gómez.
Los centros de vacaciones se realizaron en nueve lugares, incluyendo la iglesia Catedral; Cristo Obrero, comunidad Nuestra Señora de las Nieves, Nuestra Señora de Fátima, San Miguel, Santuario Jesús Nazareno, Santuario María Auxiliadora, en el Santuario Santa Teresa de los Andes y en la sede de la junta de vecinos Cardenal Silva Henríquez. En cada una de estas sedes se ofrecieron diversas instancias de aprendizaje y recreación.
Respecto del balance de estos Cevas de Invierno, la coordinadora diocenana manifestó que están con mucha alegría por la masiva respuesta a la invitación. Agregó que “los niños participantes correspondieron a menores desde los cinco o seis años, dependiendo de la parroquia, y hasta los 12 años. Hubo parroquias que recibieron a los chicos de 13 años”.
Premio de la Paz
Los Cevas fueron distinguidos con el Premio por la Paz, que otorga cada año el Obispado local y que se entregó en la misa del 31 de diciembre, en concordancia con el mensaje del Papa Francisco para 2023: “Nadie puede salvarse solo. Recomenzar desde el Covid-19 para trazar juntos caminos de paz”.
Los Cevas se han extendido por el país e, incluso, se han convertido en un verdadero “producto de exportación”, al ser emulados en otras naciones como Honduras.