Feria del Libro, entre el esfuerzo de 25 años y una apuesta mayor

El jueves de la semana pasada se inauguró la XXV Feria del Libro “Dinko Pavlov”, tradicional actividad que se enmarcó, como en años anteriores, en el programa de las Invernadas. Durante tres días, el evento gratuito ofreció un panorama variado, destacando todo el cuidado puesto en tener presentaciones de teatro, cuentacuentos y otros espacios para los niños y las niñas y adolescentes.

Con grandes escritores nacionales y regionales, esta versión no estuvo  exenta de polémica, dada ésta principalmente por la protesta que realizaron exponentes de la denominada Coordinadora Popular Magallanes 50 Años y la Coordinadora Feminista repudiando la presencia del escritor Guillermo Parvex.

Más allá de aquello, cabe destacar la organización del encuentro que ha permanecido en el tiempo y que busca fomentar el arte, la cultura y la literatura.

Por años deambulando por diferentes espacios, la feria ya tiene una casa conocida, siendo las dependencias del Centro Cultural Municipal un espacio amable para albergar gran parte de las actividades encabezadas por destacados escritores y también reconocidos elencos.

La comunidad tiene, además, la oportunidad de conocer la oferta literaria y cultural a través de doce stands, por lo cual la feria se presenta como una oportunidad para que editoriales, librerías regionales y pequeños emprendedores ligados al mundo de la cultura puedan comercializar sus productos y promover sus negocios.

Sin embargo, la feria siempre se ha visto como un pariente pobre de las Invernadas y pareciera mantenerse gracias a cierta inercia.

Se valora todo el esfuerzo desplegado por 25 años, tiempo en que se han sorteado muchos obstáculos y también se han vivido momentos estelares de la feria. Sin desconocer todo aquello, también se aprecia que hay espacio para que esta muestra crezca más y apueste, así como otras actividades de las Invernadas -Carnaval y Chapuzón- a trascender las fronteras regionales.