Senador Kusanovic pide alcalde para Antártica y llama al Estado a asumir Estatuto Antártico
Dice que ello ayudaría a reforzar la presencia chilena y geopolítica en el continente blanco.
La conveniencia de dotar a la Antártica de un alcalde y de asumir los compromisos adquiridos con el Estatuto Antártico publicado hace cerca de 3 años, planteó el senador Alejandro Kusanovic, quien acusó de “notable abandono de deberes” al Estado por no asumir lo plasmado en dicho documento.
Kusanovic manifestó que la creación de la comuna se hizo pensando en una posición geopolítica, “pero nunca se ha llevado a cabo el hacer elecciones ahí y creo que eso ha sido un error”.
Dice que ello ayudaría a reforzar la presencia chilena y geopolítica en el continente blanco, algo que considera hasta hoy “tibia y temerosa” y que requiere de una mano más enérgica. Agrega que en esto sería importante la presencia de un jefe comunal que ayude a levantar Villa Las Estrellas con una infraestructura acorde a la historia, las tradiciones y las costumbres de Magallanes, “una arquitectura que tenga historia y poesía, porque es parte del asentamiento humano en el territorio”.
En cuanto al Estatuto Antártico, sostuvo que éste fijó un plazo de dos años desde su entrada en vigencia (marzo de 2021), para la dictación de diversos reglamentos para garantizar y materializar la gobernanza en el Territorio Antártico Chileno. Cumplido ese plazo (marzo de 2023), ninguno de ellos se encuentra vigente.
Entre éstos, se encuentra el reglamento del Comité Operativo para la Evaluación de Impacto Ambiental; el reglamento de los Comités Nacionales Antárticos; el reglamento para las actividades antárticas que requieren autorización previa conforme a la normativa del Protocolo Ambiental al Tratado Antártico; el reglamento para homologación de las actividades antárticas de operadores no estatales; y el reglamento para las actividades turísticas antárticas.
“Es una omisión grave e inexcusable, que corona una tendencia imperante en el Estado chileno respecto de las zonas extremas en general y la Antártica Chilena en particular. La política antártica chilena no es más que una política de prestigio, de titulares y de fotos, que juega al solitario, elude las obligaciones históricas y carece de una visión estratégica”, enfatizó Kusanovic.
Fiscalización
Añadió que lo anterior es especialmente grave en el ámbito de la fiscalización de las actividades económicas permitidas en la Antártica y el Mar Austral, esto es, el turismo y la pesca. En el primer caso, “es claro que el aumento sostenido del número de visitantes que cada verano se concentran en el área de las islas Shetland del Sur y el sector occidental de la Península Antártica rebasó los límites razonables. No sólo en términos del número total anual de visitantes, sino de la exagerada concentración de turistas en pocos días y en pocos sitios de interés, cuyo impacto ambiental desde hace tiempo alerta a los científicos. El turismo en el sector sudamericano de la Antártica interesa a la economía de Ushuaia, lo que contrasta con la pasividad de nuestra política exterior en el ámbito de la regulación de bacalao y krill que tiene lugar en el ámbito de CCMLAR (uno de los llamados pilares del Sistema del Tratado Antártico). Allí la industria chilena se enfrenta con problemas y falta de apoyo, incluso con falta de cooperación de servicios públicos que, conforme con lo que los reglamentos del estatuto antártico, debería estar disponibles para facilitar faenas totalmente ajustadas a las más exigentes normas de conservación. Por donde peca de indolencia ambiental el gobierno, paga la industria pesquera de Chile en el mar austral”.
“Esa negligencia y notable abandono de deberes del gobierno con la materialización del Estatuto Antártico, se suma a la exclusión de la Provincia Antártica como territorio especial en el borrador del texto constitucional, ungen el ocaso de una política antártica territorialista, construida peldaño a peldaño, con patriotismo y participación de numerosos gobiernos en el pasado”, enfatizó el senador.