La antorcha ilumina a Chile

Vladimiro Mimica Cárcamo
Asesor gubernamental
Juegos Panamericanos 2023

El lunes dos de octubre, desde Visviri por el norte a Puerto Toro por el sur austral e Isla de Pascua en la Polinesia, comenzó a desplazase por Chile entero la antorcha Pana y Parapanamericana, Santiago 2023.

Se llegó, tras una carrera de largo aliento, a la recta final que parecía lejana. Chile afrontó su más importante desafío deportivo, luego, de la heroica organización del Campeonato Mundial de Fútbol de 1962, de aquello han transcurrido ya 61 años.

Más de seiscientos cincuenta millones de dólares ha significado la inversión total de esto Juegos Santiago 2023, inversión que puede parecer gigantesca, pero, que es el 50% de lo invertido hace 4 años en Lima y un tercio de lo invertido hace 8 años Montreal Canadá. Nuestros juegos Pana y Parapanamericanos, en un intento de descentralización, han tenido presencia viva en San Pedro de La Paz, en la Región del Biobío por el sur; en la Región del Libertador Bernardo O’Higgins y en las playas de Pichilemu, en el gran Valparaíso, en su puerto principal, en Viña del Mar, Quillota, Los Andes, El Quisco y Algarrobo.

Este hito en la historia del deporte chileno ha significado un despliegue nunca antes visto a nivel comunicacional, para que así doscientos millones de tele espectadores puedan seguir, paso a paso, las alternativas del gran evento chileno en todo el continente. Ocho mil atletas, entre hombres y mujeres que han estado representando a los distintos países de nuestra orgullosa América, han sido nuestros huéspedes, nuestros invitados de honor a la cita máxima deportiva, después de los Olímpicos, a nivel deportivo planetario. 

Se estimaba que más de cien mil personas serían las que, atraídas por la magia de los Juegos, visitarían Chile desde el 20 de octubre a mediados de noviembre, significando esto un aporte oportuno, esencialmente al turismo, tan severamente golpeado durante la pandemia.

He tenido el privilegio de estar inserto, desde el Ministerio del Deporte, en lo que ha significado un amplio despliegue humano y profesional, que -tengan la certeza- nos permitirán cumplir con la palabra empeñada por el deporte chileno durante el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, con los deportistas de Chile y del continente, con Panam Sport y, en general, con todos quienes depositaron su confianza en la capacidad organizativa de Chile. El trabajo ha sido hasta extenuante y donde profesionales, funcionarios y trabajadores, en las obras de infraestructura, pusieron lo mejor de sí para alcanzar en hora oportuna tener a disposición del mundo del deporte escenarios de primerísimo primer nivel a nivel Continental y Mundial.

La Luz que ya ilumina Chile fue encendida hace un mes en Puerto Toro, por la ministra Camila Vallejo y el presidente Olímpico del Comité Chileno, Miguel Ángel Mujica; luego de navegar por el histórico canal Beagle, lo hizo sobre las aguas del estrecho de Magallanes, para desde el muelle Arturo Prat, recorrer nuestra ciudad, de manos de hombres y mujeres, destacados deportistas y vecinos, los que acompañados principalmente por nuestras niñas y niños, sintieron el apoyo y la emoción con la que regaron nuestras calles y avenidas. O, ¿No es emoción pura, ver al deportista más completo de la Región Austral, a sus 82 años, avanzar con la antorcha en mano, por el corazón de Punta Arenas? Gran acierto el de la organización, brindar ese justo reconocimiento a quien tantas satisfacciones nos brindara en las canchas y en las pistas, que conocieron su espíritu deportivo y talentos inagotables. Antonio Rispoli Giner, “El Toto” según propia confesión, vivió su jornada deportiva más hermosa y emotiva, nunca soñada. ¡Satisfacción y orgullo, merecido amigo! 

La antorcha avanzó por Chile, para el día 20, el día señalado, se encendiera el Pebetero en nuestro Estadio Nacional, para indicarle al mundo entero que, en un país pequeño, lejano pero pujante, hay una Llama que ilumina sus cielos y de todo el continente, por ser Chile el escenario, que nos permite marcar el hito deportivo más importante en lo que va corrido del siglo XXI. 

Que la Llama Panamericana, alimente nuestros espíritus. Que la sana competencia y la infraestructura del primer nivel continental dispuesta para el lucimiento de nuestros atletas, despierte el entusiasmo de niñas, niños, jóvenes y adolescentes, para hacer del deporte una conducta de vida permanente, que nos permita una salud mejor no sólo en lo físico, también en lo espiritual, también en lo moral que se hace tan necesario en nuestros días.

Que los más grandes valores del deporte nos acompañen siempre más allá de merecidas medallas que se han colgado en sus pechos victoriosos. Anhelamos, desde lo más profundo, que la antorcha que supo del frío austral, pero también de la calidez de sus gentes, ilumine por siempre los cielos y los caminos que, con el aporte de todos y todas, debemos seguir ensanchando.

Santiago 2023 se ha constituido “en el punto de encuentro” de todas las chilenas y chilenos, también del pueblo inmigrante que acogemos y de todos los hombres y mujeres de bien que, empapados del espíritu deportivo panamericano, están haciendo de Chile el epicentro de sus mejores logros y afanes. 

¡Todos han sido bienvenidos a Santiago 2023, al punto de encuentro de toda la humanidad!