Necrológicas

70 años de Puerto Williams y el misterio de su fundación

Jueves 23 de Noviembre del 2023

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Noviembre es un mes que muchos magallánicos suelen vivir con rapidez, posiblemente por la proximidad del fin de año. Los artistas, los escritores a menudo están ejecutando proyectos los cuales se encuentran en la etapa de finalización; a su vez, la comunidad científica en general, los universitarios y docentes, los alumnos de colegios y liceos, se hallan en la culminación del año escolar, con sus actividades académicas y exámenes de rigor. A esta realidad no escapan los servicios públicos, ni las distintas empresas del sector privado. Tal vez por eso muchas efemérides que revisten gran importancia regional, por su indudable sentido histórico y simbólico, pasan lamentablemente desapercibidas.

Para empezar, los grandes motines, -el de Cambiaso y el de los Artilleros-, que asolaron y destruyeron la colonia de Punta Arenas en el siglo XIX ocurrieron precisamente en noviembre. Los historiadores han narrado en detalle los pormenores de cada una de las insurrecciones. Nosotros sólo agregaremos que luego de la sublevación del teniente Miguel José Cambiaso el 21 de noviembre de 1851 y de la serie de acontecimientos de sangre que le sucedieron, paralizaron dramáticamente los intentos de progreso en la aldea que se levantaba a orillas del estrecho de Magallanes. En cambio, el levantamiento de los artilleros, coludidos con parte de la población, en contra de autoridades y de la guarnición que custodiaba el, presidio independiente del medio centenar de muertos y la destrucción material que se debió lamentar, tuvo una repercusión que no podemos olvidar. El Presidente Aníbal Pinto suprimió la categorización de colonia penal que lastraba Punta Arenas desde sus orígenes. No es aventurado señalar, que desde ese mismo instante comenzó a despuntar Magallanes como territorio de colonización.

En un contexto completamente distinto, nuestra aviación rememora el 1 de noviembre por dos acontecimientos absolutamente diferentes, pero de innegable contenido humano e histórico. En 1916, David Fuentes llevando de pasajero a Emilio Castro, en su aeroplano “Talcahuano” sobrevoló por primera vez el estrecho de Magallanes uniendo Punta Arenas con Porvenir, en veintitrés minutos; en cambio, veinte años después, en 1936, Carlos Fischer, primer piloto civil de Magallanes, perdía la vida en un horrible accidente en las inmediaciones de Chabunco, a metros del aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo.

A veces, de la tragedia hemos sacado lecciones de provecho. En la medianoche del 29 de noviembre de 1887 ocurrió el incendio que destruyó la antigua casa de la gobernación. Con ello se perdieron para siempre, cartas y documentos de la colonia de invaluable valor patrimonial. En respuesta, los vecinos cansados de las desgracias que ocasionaba el fuego, fundaron en junio de 1889, el Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas.

Además, conmemoramos otras fechas de gran significación. El día 11 de noviembre nos recuerda la misa ordenada por Hernando de Magallanes celebrada en bahía Fortescue por el capellán Pedro Valderrama en 1520. Los expedicionarios habían encontrado al fin, la salida que buscaban, en un mar que denominaron “Pacífico” por la quietud de sus aguas. Aquel hallazgo demostraba que la Tierra era redonda y no plana, como aseguraban los principales mapas hasta ese entonces. En tanto, el 6 de noviembre festejamos la decisión adoptada por el Presidente Pedro Aguirre Cerda en 1940, de incorporar más de 1.250.000 kilómetros cuadrados del continente antártico al territorio nacional.

Pero hay a nuestro modo de ver, un acontecimiento de mayor relevancia y que no podemos pasar por alto. Hace exactamente setenta años, en 1953, la Armada de Chile con la anuencia del gobierno de turno, fundó en la ribera norte de la isla Navarino, frente al canal Beagle, una población que se convertiría en la capital de una provincia, la cual, a no dudarlo, es el verdadero punto de entrada a la Antártica.

Visión geopolítica

Consignamos que en la visita efectuada a Magallanes en febrero de 1948, el Presidente de la república Gabriel González Videla, luego de regresar a Punta Arenas de su viaje a la Antártica (fue el primer Mandatario en el mundo en pisar el continente helado) donde inauguró de manera oficial la base Bernardo O´Higgins, planteó abiertamente la necesidad de fundar el departamento de Navarino, cuya jurisdicción comprendería todas las islas situadas al sur del canal Beagle y el territorio antártico chileno.

El proyecto adquirió mayor fuerza luego que la escuadrilla de la Fuerza Aérea apostada en Punta Arenas demostró su capacidad operativa al crear el 12 de marzo de 1951, en bahía Paraíso, la primera base de la institución en la Antártica, que se agregaba a las de la Armada y del Ejército. De modo, que se requería establecer a la brevedad un punto intermedio entre la capital regional y la denominada Terra Australis Ignota. La iniciativa fue retomada en la segunda administración de Carlos Ibáñez del Campo, (1952-1958) quien, desde un principio mostró un especial interés por el desarrollo de las zonas extremas del país, principalmente, de Magallanes.

De esta manera, la Armada emprendió desde febrero de 1953, el plan que buscaba levantar un poblado en la zona de Navarino. De acuerdo con lo señalado por el escritor Rodrigo Fuenzalida Bade, en la página 1241, del tomo IV de su monumental trabajo “La Armada de Chile desde la alborada hasta el sesquicentenario (1813-1968)”, los principales impulsores de esta obra fueron el comandante en jefe de la III Zona Naval, almirante Donald Mc Intyre y el jefe de Estado Mayor, comandante Jorge Bornscheuer. El proceso de materialización del proyecto fue en extremo difícil, por cuanto se carecía de medios apropiados para llevar adelante los trabajos operativos. La Armada apenas disponía en esa época, desde la zona de Chiloé hasta Magallanes, de unas pocas y desvencijadas embarcaciones: los patrulleros Lientur y Lautaro; el transporte Micalvi, la escampavía Sobenes y las barcazas Contreras y Díaz. 

En un principio, la Armada decidió mantener el lugar con la denominación que le había entregado Federico Lawrence, hijo de un pastor anglicano inglés, quien recordemos, se había casado con Nelly una representante de la comunidad yagán. Ambos tuvieron una hija, a la que llamaron, Luisa, la que falleció prematuramente. Sin embargo, algunos años más tarde, el 22 de agosto de 1956, el decreto Nº3.399 emitido por el Ministerio de Defensa modificó el nombre original por el de Puerto Williams como una forma de hacer justicia al comandante de la goleta Ancud, que como sabemos, tomó posesión para el gobierno de Chile, del estrecho de Magallanes y tierras adyacentes, el 21 de septiembre de 1843.

Cinco momentos

distintos para

crear un pueblo

Uno de los mayores enigmas es precisar con exactitud la fecha de fundación de Puerto Luisa. Creemos no equivocarnos al señalar, que existen al menos cinco fechas diferentes que intentan explicar el nacimiento del poblado.

Tenemos el testimonio entregado por el teniente 1º, comandante de la barcaza Contreras en aquel entonces, -desde marzo de 1953 a marzo de 1954-, Hernán Correa Bórquez, quien aseguró en una carta dirigida al comandante en jefe de la Armada en 2007, respaldada  al mismo tiempo con documentos respectivos, que la construcción de Puerto Luisa comenzó en mayo de 1953.

Las afirmaciones de Correa Bórquez fueron confirmadas por el teniente 2º, jefe de la compañía de infantería de marina, Eduardo Vásquez Parada y estudiadas por el profesor de historia, geografía y educación cívica del Museo Naval y Marítimo de Valparaíso, Marco Fernández Adriazola, que contrastó las versiones de los oficiales con lo publicado por el diario El Magallanes en su edición del 12 de mayo de 1953, para concluir lo siguiente:

“Realizando una relación entre la información entregada por los señores Correa y Vásquez y lo publicado en el diario El Magallanes del 12 de mayo, podemos afirmar que el día que se inician los trabajos de construcción de los primeros edificios de Puerto Luisa hoy Puerto Williams fue el 14 de mayo de 1953”.

Lo anterior es cuestionado abiertamente por suboficiales, tropa y personal, principalmente de dotaciones de las barcazas Contreras y Díaz, que participaron en la misión. Es lo que nos aseguran, entre otros, el antiguo escribiente Elsio Cárcamo Velásquez, que ha llevado una profusa investigación sobre el tema, entrevistando a varios oficiales activos en aquella época, entre estos, al vicealmirante en retiro Fernando Camus Scherrer y al teniente Theodor Tannen Saffer.

De acuerdo con la información proporcionada a Cárcamo por el teniente Tannen, la barcaza Contreras zarpó del puerto de Punta Arenas con destino al Beagle el martes 13 de octubre de 1953. “Durante la estadía se construyó una casa que es la actual Posta sanitaria y se efectuó un levantamiento hidrográfico y topográfico. Se sondó el bajo Herradura constatándose que la sonda mínima reducida son 2.3/4 metros. El día 2 de noviembre se hizo entrega de la casa al capitán de puerto, sargento 1º (Rt.) Moisés Villalón”.

Las anotaciones de Tannen son reafirmadas por el entonces subteniente Camus, quien en sus memorias señala no recordar con exactitud la fecha en que se inició el cumplimiento de la misión, “pero fue durante el mes de octubre de 1953”. Después de mencionar a las distintas personalidades civiles y militares que trabajaron en la primera edificación, unido a la relación de documentos comparados entre las versiones de Camus y Tanner, Elsio Cárcamo concluyó lo siguiente:

“Esta primera comisión que duró unos 20 días, terminó de construir la casa el 2 de noviembre de 1953, y ese día como a las 11 horas, se realizó una ceremonia, con izamiento del Pabellón Nacional y con el discurso a cargo del capitán de corbeta Sr. Luis Mansilla Yévenes, quien resaltó la importancia de este acto ya que ello significaba la fundación del futuro centro poblacional en la región del Beagle”.

Es aquí donde se nos aparece la posible tercera fecha de fundación, propuesta por el ingeniero civil provincial Vladimir Covacevich, quien tuvo una actuación gravitante en la ejecución de varias obras de infraestructura en Puerto Williams. Al respecto, en una ponencia realizada en el Primer Congreso de Historia de Magallanes en 1989, Covacevich formuló su tesis basada en la celebración de un acto oficial ocurrido el 15 de noviembre de 1953, reproducido por el diario La Prensa Austral ocho días más tarde y que dice:

“Las autoridades y comitiva bajaron a tierra, visitando la Posta sanitaria de la Armada que está atendida por cinco personas”. En la nota, después de señalar que dicha posta fue construida por personal de la Armada e inaugurada el 2 de noviembre, el matutino expresa que la habitación tiene las comodidades necesarias para esta clase de edificios. Luego de resaltar la “indescriptible belleza” de su entorno puntualiza: “Desde luego, en Puerto Luisa se levantaráuna población, habiéndose ya trazado sus calles, instalación de los diversos servicios públicos, aprovisionamiento de agua potable que será traída a escasos mil metros del lugar elegido para dicha población”. A continuación, La Prensa Austral cita este episodio:

“A las 9 horas, el obispo diocesano monseñor Vladimiro Boric C., ofició una misa de campaña ayudado por el capellán de la Armada R.P. Manuel Miranda. Esta se realizó en un altar improvisado que se instaló frente al edificio de la posta, al pie del mástil donde se izó el pabellón nacional a los acordes de la banda de la Tercera Zona Naval, que también viajó en el (transporte) Angamos, himno que fue coreado por todos los asistentes”. En un apartado, se agrega una entrevista al obispo Boric que enfáticamente decía: “Veremos crecer a esta nueva población que se crea desde éste momento”.

Este es en definitiva, el episodio que emplea Covacevich para argumentar su proposición, refrendado en el semanario parroquial “El amigo de la familia” en su edición de 29 de noviembre de 1953: “El acontecimiento que tuvo lugar en Puerto Luisa el domingo 15 de noviembre con la presencia de autoridades y funcionarios públicos de la provincia equivale a la colocación de la primera piedra no sólo de la futura Parroquia de Santa Luisa, sino de una capital departamental que incrementará el desarrollo del archipiélago sureño”.

En su exposición, Covacevich plantea el hecho irrefutable de que a falta de un decreto o un acto de fundación, la III Zona Naval solemnizó este gran hito histórico con una ceremonia en que confluyeron autoridades regionales a un acto religioso que dio vida a un centro chileno a orillas del Beagle, con lo cual se atrevió por un lado, a refutar una fecha asignada:

“Por razones desconocidas, tal vez por un simple error administrativo, en medios navales se ha considerado y se celebra el 21 de noviembre de 1953 como el de la fundación de Puerto Williams, en circunstancias que en tal fecha no ocurrió nada especial en el lugar y sí, como se ha visto, seis días antes”. A cambio, propuso otra en su remplazo:

“Con el conocimiento de todos los antecedentes entregados sería de desear que se revisara por las autoridades navales la fecha que se ha dado en celebrar como fundacional y que se tuviera como verdadera la del 15 de noviembre de 1953”.

Ahora bien, efectivamente como señala Covacevich en su informe, la Armada festeja el 21 de noviembre de 1953 como fecha oficial del levantamiento de Puerto Luisa, en lo que podríamos denominar como cuarta tratativa de fundación, fecha que se puede comprobar en distintas publicaciones digitales e incluso, institucionales. Ignoramos si aquella decisión fue adoptada para encontrar una salida conciliadora, acordada entre todas las partes en cuestión.

Aún tenemos una quinta fecha de fundación que curiosamente, fue instituida por el gobierno de Magallanes y Antártica Chilena en la 35º sesión ordinaria de Consejo Regional realizada el 12 de septiembre de 1996, e instaurada por resolución Nº42 del 15 de octubre del mismo año, que estableció las efemérides regionales, provinciales, los símbolos de identidad regional, del nombre, escudo, bandera, escarapela, árbol, flor, animal e himno.

Con respecto a las efemérides provinciales, en el caso específico de Puerto Williams, se fijó el 23 de noviembre como su fecha de fundación, que responde seguramente, a la publicación que hiciera La Prensa Austral en la fecha señalada, de los eventos efectuados anteriormente.

Belleza y turismo

De lo que sí estamos completamente seguros es que la singularidad del paisaje de Puerto Luisa-Puerto Williams, desde el primer momento, cautivó la atención de importantes medios nacionales como la prestigiosa revista Zig-zag que en su edición del 4 de marzo de 1960 publicó un artículo exclusivo titulado “Puerto Williams, la ciudad más austral del mundo”, que incluyó además, una fotografía en portada a todo color.

“El atractivo de la isla se ha extendido: ahora los turistas de las regiones de más al norte del país llegan hasta allí, y no solamente consideran como terminal a Punta Arenas. Hay en Puerto Williams –y todo ha sido creado por la Armada- una planta hidroeléctrica, y otra, complementaria y auxiliar, a base de generadores. Hay servicios administrativos; Correos, Registro Civil, Gobernación Marítima”. La nota termina con una reflexión:

“Las 800 y tantas personas que componen la población de esta isla Navarino y sus alrededores están en las fronteras más extremas de Chile. Viven en la ciudad más austral del mundo”.