Pescadores artesanales cierran el año con movilizaciones y sin bonos de emergencia
Desde la semana pasada se han vuelto a manifestar pescadores en la Plaza de Armas Muñoz Gamero, específicamente frente a dos edificios institucionales: la Casa de los Intendentes y el gobierno regional. Las motivaciones son similares a las iniciales expuestas por los distintos sindicatos adheridos a la movilización y apuntan a medidas especiales para paliar la crisis socioeconómica que viven muchas de las familias, como entregas de bonos, congelamiento de impuestos y otros tributos ante el Servicio de Impuestos Internos o reducción tarifaria para el uso de las instalaciones de la Caleta Barranco Amarillo.
Sin embargo, tal como les fue manifestado por las autoridades tanto de la Delegación Presidencial Regional, como del gobierno regional desde los inicios de las manifestaciones, los puntos específicos que piden escapan de las facultades legales que se les atribuyen. Así lo confirmó el gobernador regional, Jorge Flies: “El gobierno regional no entrega bonos del punto de vista legal (…) les hemos manifestado que tenemos toda la voluntad de colaborar pero no es de incumbencia o de responsabilidad legal de nosotros. Nosotros respondemos a proyectos de infraestructura y programas que se nos presenten, no a bonos de emergencia”.
En ese sentido, señala Flies, “es una decisión del gobierno central ante una emergencia real. Hasta el momento no está declarada ninguna emergencia en el sector pesquero, entonces si no hay declarada una emergencia es muy difícil que nosotros podamos cooperar con la resolución en un proyecto”. Y más tajante agrega que “no podemos llegar y pasar a un particular platas públicas, eso no existe en la ley”.
Como medidas en línea con los proyectos que se llevan a cabo en términos de infraestructura, Flies agrega que “nosotros tenemos el proyecto más grande en Chile, que va a ser aplicado este año y que va a abarcar alrededor de 4.000 millones de pesos del gobierno regional y 1.000 millones a Indespa, que es primera vez que va a tener un volumen tan grande en la región”.
Esto tendrá un impacto directo tanto para armadores como para pescadores y tripulantes. Por lo tanto, el gobernador reitera que “lo que le hemos dicho nosotros es que en el ámbito de emergencia, está fuera de nuestras atribuciones directas, pero sí estamos dando una respuesta que ninguna otra región”.
Difícil avizorar cuál será la postura frente a esta realidad por parte de los sindicatos pesqueros, quienes ya indicaron en diversas ocasiones que se mantendrán movilizados hasta tener respuestas. Pero el gobernador es tajante: “No puede ser la presión la que destine los recursos públicos”.