“Son las mismas familias las que han iniciado los juicios para encarcelar a sanguinarios como éste”
Manuel Aguilante, ex preso político y actual presidente del Programa de Reparación de atención Integral en Salud y derechos humanos, Prais Magallanes, se refirió a la condena del oficial en retiro del Ejército de Chile, Julio Castañer González, por el caso Quemados.
“Es importante que se castigue, que se condene a los violadores de derechos humanos sobre todo de casos emblemáticos que dan muestra de la barbarie de la dictadura”, comenzó esgrimiendo.
A su vez, se mostró crítico con el periodo de los gobiernos de la Concertación, ya que según sus propias palabras “permitió que muchos de estos torturadores se mezclen con la sociedad civil y sean ejemplo de conducta y de la educación como el caso de (Julio) Castañer que incluso llegó a trabajar en la Universidad de Magallanes”.
“Hay varios que se han camuflado en todas partes y es necesario que los conozcamos. En Chile nadie debe estar más allá de la ley en función de que todos los delitos deben ser sancionados”.
Por último, Aguilante fue enfático al apuntar contra el Estado de Chile a la hora de enjuiciar a violadores de derechos humanos. “En los distintos gobiernos ha habido falta de iniciativa en perseguirlos y han sido los propios familiares de las víctimas de la represión los que han iniciado juicios para encarcelar a sanguinarios como éste (Julio Castañer)”.
Cuando el coronel en retiro fue funado en Punta Arenas
Julio Castañer llegó acompañado por funcionarios de la PDI hasta el Aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo de Punta Arenas, pero los efectivos policiales poco pudieron hacer frente al grupo de personas que esperaban para increparlo. Había sido inculpado por el ex conscripto Fernando Guzmán como uno de los integrantes de la patrulla militar que quemó a los jóvenes Rodrigo Rojas de Negri y Carmen Gloria Quintana, el 2 de julio de 1986.
Un grupo de integrantes de la Agrupación Hijos y Nietos por la Memoria dieron con las horas de vuelo del coronel para abordarlo y manifestarles, de manera violenta, su indignación por su libre andar, en plena impunidad e, incluso, habiendo hecho clases en la Universidad de Magallanes. Se trató de una acción fundamental para visibilizar esta situación, que buscó sensibilizar a la vez sobre las diversos casos de impunidad que se mantienen al día de hoy.
La acción tuvo alcance nacional, reproducida en canales televisivos, matinales, radios y portadas de diarios desde distintos enfoques. Manifestantes llegaron con pancartas y un bidón de gasolina, para simbolizar el crimen del que el militar en retiro fue parte y protagonista en sus años en el Ejército. Esta funa se hizo durante al viaje del coronel en retiro a Santiago, en julio de 2015, para prestar declaraciones ante el ministro Mario Carroza a cargo del caso Quemados.
Julio Castañer González alcanzó el rango de coronel al interior del Ejército, estuvo a cargo del Regimiento Dragones, perteneciente a la V División de Ejército, y ocupó el cargo de jefe de Estado Mayor del Comando Conjunto Austral.




