La partida de Sebastián Piñera

Con la fuerza que tienen aquellos hechos que constituyen realmente noticia, en todos los alcances conceptuales de aquello, el fallecimiento del ex Presidente Sebastián Piñera generó gran revuelo en el país.

Los primeros informes sobre el helicóptero que capotó y la posterior confirmación de su deceso tuvieron al país en vilo por largos minutos. La prudencia llevó a muchos medios a no precipitarse a anunciar el desenlace fatal y a esperar la confirmación de los organismos competentes, dando muestra, una vez más, de la ética que debe imperar en la prensa seria y responsable.

Piñera sirvió como Presidente de Chile en dos periodos y su repentina muerte permite reflexionar sobre su vocación demócrata y su adhesión al libre mercado.

A lo largo de su carrera política, demostró un compromiso inquebrantable con los principios democráticos, tomando decisiones
a típicas a su sector.

Su participación activa en la transición hacia la democracia en Chile y su papel posterior en la consolidación de instituciones sólidas son testimonio de su adhesión a los valores fundamentales de la libertad.

Defensor del libre mercado, su visión se centraba en el papel crucial que desempeña el sector privado como motor de desarrollo, generando empleo y oportunidades.

Su partida deja un vacío, especialmente en su sector político, en términos de liderazgo efectivo.

La recuperación del país tras el terremoto del 27 de febrero de 2010, el rescate de los mineros de la mina San José (5 de agosto-13 de octubre de 2010) y, más tarde, la firma del acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución (15 de noviembre de 2019) serán hechos por los cuales Piñera será siempre recordado.

Piñera tuvo muchos detractores y la forma en que su gobierno enfrentó el denominado estallido social puede ser el punto más criticable y obscuro de su paso por La Moneda.

La visión de Piñera se extendió más allá de lo económico. Demostró interés por fortalecer la enseñanza y fomentar la innovación tecnológica.

Como magallánicos, no podremos olvidar el episodio de “la crisis del gas”.

Pero, el tiempo dirá si su legado a esta zona pasará por la instalación de la industria del hidrógeno verde, tras impulsar durante su último periodo presidencial la estrategia que puso a Magallanes como región pilar junto con Antofagasta.