Licitación para demoler ex hospital debe ser visada por Contraloría

Los montos que cuesta demoler el edificio del ex Hospital Regional de Punta Arenas, sobre 5 mil millones de pesos, obligan al gobierno regional a tener que enviar las bases de la licitación a toma de razón a la Contraloría Regional.

El costo supera con creces el límite de las resoluciones que no se encuentran afectas a este tipo de trámite. “Esto nos obliga a informar al organismo de control las bases administrativas y especificaciones técnicas del proyecto, que considere todas las actividades a desarrollar durante el proceso de demolición del ex hospital”, informó a La Prensa Austral el jefe de la División de Infraestructura y Transportes del gobierno regional, Ricardo Foretich Oyarzún.

Las bases deben incluir las medidas de seguridad, los planes de contingencia, el cómo van a operar con la comunidad y el reguardo del entorno inmediato. Esto debe incluir un plan de gestión vial, porque además hay dos colegios en el entorno inmediato lo que significará adaptar los trabajos a ciertos horarios.

“Todas estas son definiciones que debemos exigirles a las empresas constructoras que se interesen en participar en el proceso. Ahora estamos en eso, terminando de elaborar las bases de licitación para enviarlas a Contraloría en las próximas semanas”, indicó.

En el mejor de los escenarios, si no hubiesen observaciones, este trámite podría demorar unas tres semanas y en junio el gobierno regional estaría en condiciones de llamar a licitación.

La idea que se tiene es separar la licitación en dos procesos. Uno que contemple la demolición del edificio antiguo, incluyendo el consultorio externo de un piso, que se ubica en Zenteno y Condell para liberar el espacio que requiere la Policía de Investigaciones para construir su edificio institucional, un proyecto que está muy avanzado.

Demolición

Se calcula, en principio, que serían 16 mil metros cúbicos de material, los que se quieren retirar en dos etapas de 8 mil metros cúbicos cada una.

En una segunda etapa se demolería el edificio más antiguo que da a calle Angamos.

Hacerlo de esta manera es mucho más barato que encomendar las obras de demolición a la empresa que vaya a ejecutarse las obras esperadas, como el nuevo edificio municipal y el de la Policía de Investigaciones.