23 años de esfuerzo y comunidad en Loteo Varillas: la historia de la organización “Virgen de Covadonga”
La organización Virgen de Covadonga, ubicada en el sector del Loteo Varillas en Punta Arenas, celebró 23 años de arduo trabajo comunitario y liderazgo bajo la presidencia de Aurora Reyes Bravo, quien ha impulsado esta agrupación para transformarla en una fuente de desarrollo y apoyo para sus integrantes. Desde sus inicios, esta organización ha sido un pilar fundamental en el empoderamiento de las mujeres y el fortalecimiento de la comunidad local, destacando su espíritu solidario, compromiso social y la constante lucha por mejoras en su entorno.
Aurora Reyes, quien se hizo cargo de la presidencia desde la creación del grupo, recuerda los primeros días en Loteo Varillas, un sector que, en sus palabras, “no tenía nada, ni caminos ni servicios básicos”. Sin embargo, esta situación no impidió que un pequeño comité de seis mujeres, al que pronto se sumaron muchas más, emprendiera una labor histórica para dotar de infraestructura y servicios a la zona. Gracias a su esfuerzo, lograron asegurar electricidad, agua potable y gas para todas las viviendas del área, cumpliendo su objetivo de mejorar las condiciones de vida para sus familias.
Desarrollo productivo
y apoyo mutuo
La organización Virgen de Covadonga, que tiene 11 socias activas, ha trascendido en muchos aspectos de su misión inicial. Con el tiempo, no sólo se ha consolidado como un punto de encuentro para las mujeres del sector, sino que también se ha convertido en una plataforma para proyectos productivos, en gran parte gracias al apoyo de empresas privadas. Esto permitió que muchas socias en la producción agrícola y artesanal, convirtiéndose en una fuente de ingresos y en una actividad que mantiene a la comunidad unida durante el año”. Nos complementamos, y eso es muy importante, especialmente en invierno, cuando no podemos trabajar la tierra y nos dedicamos a las artesanías”, comenta Reyes.
Estas iniciativas han llevado a la organización a establecer convenios con empresas importantes, como Almacenes París, donde hace años vendieron productos de lana regional. Aunque esta colaboración tuvo una pausa, los integrantes están abiertos a retomarla bajo las condiciones adecuadas.
Gracias a su determinación, la organización consiguió un terreno municipal hace más de veinte años, donde construyeron su sede comunitaria. Esta sede se ha convertido en un símbolo de su esfuerzo y es el lugar donde cada martes, sin importar las condiciones climáticas, las socias se reúnen para compartir, celebrar y trabajar juntas.
Fundación
Derechos Mayores
En su labor por mejorar la calidad de vida de sus socias, la organización concluyó recientemente un proyecto de autocuidado con el apoyo de la Fundación Derechos Mayores, financiado por el Fondo de Equidad de Sernameg. El proyecto incluyó una serie de actividades físicas y de autocuidado que, en palabras de Reyes, fueron muy beneficiosas para su salud y bienestar emocional.
Carolina Martín Corvero, encargada de formación de la Fundación Derechos Mayores, resaltó el impacto positivo de este proyecto en las beneficiarias. “Estas mujeres presentan dolencias físicas asociadas al trabajo en la tierra, y el proyecto fue pensado para abordar esas necesidades”, comentó. La fundación también realizó actividades de divulgación donde las socias y las autoridades regionales pudieron compartir sus experiencias y motivar a otras organizaciones a postular a fondos similares.
Durante este proyecto, las socias participaron en sesiones de yoga, talleres de memoria y actividades de uso de hierbas medicinales, guiadas por una monitora especializada.
Esta última actividad les brindó conocimientos para hacer pomadas y bolsitas aromáticas, enseñándoles a aprovechar los recursos naturales de sus parcelas de una forma económica y práctica. Además, en el cierre del proyecto, cada socia recibió un certificado en conmemoración del Día de la Mujer Rural, un gesto significativo que destacó el aporte de estas mujeres al desarrollo rural y su compromiso.