Elefante marino murió tras varar en sector de exchipera y necropsia la realizará Museo Natural de Río Seco
El jueves por la tarde Sernapesca corroboró que el elefante marino que llegó hasta el sector de la exchipera finalmente murió. Esto ocurrió luego de una primera revisión de parte de los veterinarios del organismo, quienes indicaron que el ejemplar se encontraba en buen estado y descansando. Sin embargo, más tarde se certificó su fallecimiento y se activaron los protocolos para realizar su necropsia y determinar la causa del desenlace.
En las observaciones que realizaron los profesionales de Sernapesca, encontraron una herida leve, aunque indicaron que se encontraba en buen estado y habría llegado a descansar. Sin embargo, un vuelco a este diagnóstico inicial ocurrió cuando los equipos confirmaron su muerte alrededor de las 4 de la tarde del jueves.
Lo anterior activó los protocolos frente a este tipo de casos. Se realizó el traslado del animal gracias a la ayuda de la Municipalidad de Punta Arenas, que facilitó un camión pluma, hacia las dependencias del Museo Natural de Río Seco, donde se encargarán de realizar la necropsia. Este procedimiento está fijado para este domingo, donde participarán igualmente profesionales de Sernapesca para corroborar los procedimientos y facilitar instrumentos de seguridad, así como evitar contagios de gripe aviar, ya que los protocolos siguen activados en territorio chileno.
El director del museo, Miguel Cáceres, comentó que a juzgar por la observación macroscópica no se puede determinar alguna causa inicial. “Lo sabremos abriendo el animal. No tiene ninguna herida que uno pudiese inducir un accidente, por ejemplo, que tuviese colisionado por una embarcación mayor. No se observan traumas de esas características”, indica.
Sobre el procedimiento en sí, Cáceres explica que inicialmente se tomarán todas las medidas corporales al animal, para luego abrirlo. “Se abre con una incisión que va desde la boca hasta el ano, luego se despeja la zona abdominal, se sacan muestras de diferentes tejidos, incluida la piel, la grasa y algún tejido muscular, para toma de diferentes muestras que pueden ir desde genética, isótopos estables, histopatología, que van más vinculadas a distintos órganos, como muestra de riñón, hígado, contenido estomacal”.
La idea es que el ejemplar luego pueda quedar bajo el resguardo del Museo y que sea parte de la colección para motivos de divulgación científica. “La idea es conservarlo e integrarlo al resto de nuestras colecciones, para que quede a disposición de la divulgación científica, el arte, la ciencia y la educación”, agrega Cáceres.