Tridente antártico
No hace muchas columnas atrás en este mismo espacio, hice resaltar la notable fuerza antártica que tenemos como país y región, con la presencia de las embarcaciones que enfilan sus proas hacia el sur austral antártico, entre ellos, el rompehielo Almirante Viel, joya de nuestros mares australes, conformando trinomio con el remolcador de flota Lientur y el OPV Marinero Fuentealba. Pero ahora dirigimos nuestra atención a la conformación casi espontánea, de un pequeño grupo de personas, que el destino los ubicó en el momento e instancia precisa para conformar el Tridente Antártico, establecido por quienes tienen la responsabilidad como hacedores y fundamentalmente en la toma de decisiones para las futuras proyecciones tanto de la política, la ciencia y la operatividad técnica, que se viene consolidando desde hace ya un buen tiempo.
Son importantes autoridades en el quehacer antártico y me estoy refiriendo, a nuestro reelegido gobernador regional el Dr. Jorge Flies, al comandante en jefe de la Tercera Zona Naval, contraalmirante Jorge Castillo, que extiende sus funciones también por un periodo más y liderando hitos tan importantes en un año lleno de contundentes noticias y acciones de nuestra Armada, tanto en el mar como en la exploración aérea en la Antártica profunda, resaltando de manera consolidada el quehacer y apoyo a la ciencia antártica. Finalmente, quien cierra este tridente, nuestro querido glaciólogo y notable en su cargo, como director del Inach, el Dr. Gino Casassa, estos mismos, como un solo cuerpo de actores fundamentales, en sabiduría y reflexión, conformaron un equipo integral de saberes en la importancia de nuestra región y del Chile Polar, desde la logística, la gobernanza y la ciencia especializada en un encuentro en donde se realizó el lanzamiento del libro “Territorio Chileno Antártico: Una mirada multidisciplinaria”, donde de esta manera se plasmaba la pertinencia del encuentro en cuanto a que desde distintas miradas, los aportes y proyecciones se materializaban con un propósito común, dando el realce que corresponde con la presencia de personalidades mencionadas a nivel nacional y regional. La obra plasmada en el libro daba mucha importancia en la presentación desde sus mismos organizadores, pero el conversatorio fue mucho más allá, resaltando principalmente que es aquí en Magallanes en donde se efectúan realmente los mejores intercambios, vivenciales y experienciales de los componentes de este Tridente.
Nuestra ciudad puerta de entrada a la Antártica, nuestros ciudadanos, custodios de esta herencia territorial, maravillosa región que nos convoca a conocer a través de los distintos medios, el aprender a ser legítimamente magallánicos y antárticos chilenos, nos sentimos muy orgullosos de pertenecer a esta lejana esquina de nuestro planeta, únicos en su latitud y privilegiados en su quehacer como un modelo de ciudad, conciente de sus riquezas y por qué no decirlo también de sus fragilidades, lo que nos hace reflexionar de la responsabilidad que tenemos ante nuestros ojos. Nuestros oídos familiarizados por el sonido de aviones de distintas partes del mundo que enfilan sus narices y proas a nuestros puertos y aeropuertos, especializados en acciones polares, nuestra vista que se llena de colores rojos y blancos de embarcaciones que se aproximan a nuestras costas en busca del sustento en un ir y venir durante el verano antártico. Todos estos símbolos que comienzan a materializarse en los inicios de la primavera y terminan cuando ya el comienzo del otoño se agudiza en las regiones antárticas y subantárticas. Se nos va un año lleno de emociones y grandes aportes y cambios, deseamos seguir en esta senda de cómo un pequeño país en vías de desarrollo y una gran región como la nuestra, afloran sus potencialidades, continúe en reforzar la exploración y la investigación, requerimos de más “Tridentes”, pensadores, políticos, gobernantes, científicos y educadores que conformen cuadros completos de conocimiento y experiencias y de esa manera contribuir a un desarrollo real de la tan mentada sustentabilidad.