Las huellas antárticas de Punta Arenas
Por Tomás Ferrada Poblete
La ciudad de Punta Arenas tiene un vínculo histórico e inquebrantable con la Antártica. Durante décadas, su posición estratégica y la logística que ofrece, la instalan como la puerta de entrada predilecta por muchos exploradores hacia el continente blanco.
En un esfuerzo por revelar la importancia de Punta Arenas en asuntos antárticos, el Instituto Antártico Chileno (Inach) publicó el libro “Huellas Antárticas en Punta Arenas y el estrecho de Magallanes”, y a raíz de esta publicación, la municipalidad instauró un tour que recorre alguno de los hitos allí mencionados.
“El objetivo es hacer conciencia turística en la ciudad”, dijo Iván Torres, guía de la Dirección de Turismo del municipio. Decenas de personas se sumaron a la última versión, que se está realizando de forma periódica durante este verano.
El recorrido incluye seis paradas, donde cada uno cuenta una historia antártica que asombra a turistas y a vecinos de la ciudad.
Hotel Cabo de Hornos
Emplazado frente a la Plaza de Armas, en este edificio que hoy es un hotel, funcionó la oficina de Correos de Punta Arenas. Desde allí, el 8 de julio de 1906, el explorador británico Robert Falcon Scott depositó 400 cartas anunciando que su expedición a la Antártica fue un éxito.
Falcon Scott había zarpado del Reino Unido tres años antes y en su viaje estableció un nuevo récord llegando hasta la latitud 82°S y descubrió la meseta antártica, en la que se encuentra el Polo Sur.
Instituto Antártico Chileno
En este edificio, pegado al Hotel Cabo de Hornos, donde hoy funciona el Inach, se encontraba la residencia de Juan Blanchard, socio de Braun & Blanchard y de la Sociedad Ballenera de Magallanes, la primera en desarrollar la caza pelágica en las Islas Shetland del Sur y en la Península Antártica.
El Instituto Antártico Chileno, fundado en 1963, opera desde este patrimonial edificio, a contar de 2003. El Inach único organismo estatal responsable de coordinar, planificar y ejecutar las actividades que se realicen en el Territorio Chileno Antártico.
Edificio del Banco de Chile
Fue inaugurado en 1909 por los inversionistas Mauricio Braun y Rodolfo Stubenrauch como sede del Banco de Punta Arenas. En sus pisos superiores albergó al Club Británico, un importante punto de reunión de la comunidad inglesa en la ciudad.
En 1916, este lugar sirvió como cuartel general para Sir Ernest Shackleton, quien planificó aquí el rescate de su tripulación, varada en la isla Elefante tras el naufragio del Endurance. Luego del exitoso rescate, la Asociación Británica de Magallanes se reunió en este edificio para rendir homenaje a Shackleton y al capitán Luis A. Pardo, quien comandó la misión de salvamento.
Primera Compañía de Bomberos
Durante la era de las grandes expediciones antárticas, Punta Arenas se convirtió en un punto de partida y retorno para numerosos exploradores. A fines del siglo XIX, la ciudad era un enclave cosmopolita con una fuerte presencia de migrantes europeos, principalmente franceses, españoles, ingleses y croatas. Estas comunidades formaron diversas sociedades que, entre otras actividades, se encargaban de recibir a los expedicionarios que llegaban a la ciudad.
En aquel entonces, Punta Arenas carecía de un espacio para llevar a cabo recepciones antes de las expediciones. Por ello, hasta 1899, el segundo nivel del edificio de la Primera Compañía de Bomberos “Bomba Magallanes” se utilizó como un lugar de encuentro para recibir a los exploradores. A partir de ese año, con la apertura del Teatro Municipal, las recepciones comenzaron a realizarse en un entorno más formal.
Edificio Los Ganaderos
En este lugar, donde hoy hay departamentos, se ubicaba el Hotel de France. Allí se hospedó la Expedición Antártica Belga en 1897. Esta expedición fue la primera en invernar en el continente blanco, además descubrieron “la mosca sin alas”, o la belgica antartica, el primer insecto endémico de la Antártica.
Formó parte de esta expedición el noruego Roald Amundsen, quien en 1911 se transformó en el primero en llegar al Polo Sur geográfico, junto a la tripulación del Fram.
Monumento a Piloto Pardo
Inaugurado en 2020, rinde homenaje a Luis Alberto Pardo Villalón, el marino chileno que en 1916 lideró la misión de rescate de los 22 tripulantes de la expedición de Ernest Shackleton, varados en la isla Elefante tras el naufragio del buque Endurance.
El rescate, realizado a bordo de la escampavía Yelcho, consolidó a Chile como un actor clave en la historia de la exploración antártica.
El monumento consta de una estatua de Pardo apuntando hacia el Polo Sur y de la exhibición de la proa de la Yelcho, que durante 40 años estuvo en Puerto Williams.
En enero pasado se instaló en el monumento una placa conmemorativa por la Embajada del Reino Unido, donde se agradece a Chile por su rol en esta operación de rescate.
Hoy, el monumento honra la memoria de Pardo y es un punto turístico que refuerza los lazos históricos entre Punta Arenas, Chile y la exploración antártica.