Los desafíos en el Día del Cáncer Infantil
Cada mes de febrero se despliega la campaña para conocer los signos y síntomas del cáncer infantil con miras a pesquisar y abordar el tratamiento oportuno.
El sábado último se conmemoró el Día Internacional del Cáncer Infantil, que tiene como objetivo crear conciencia sobre esta enfermedad que registra cerca de 500 casos al año en Chile en niños y adolescentes menores de 15 años. Además, a nivel mundial, se instala como la segunda causa de muerte en este segmento, después de los accidentes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Esta patología se produce con el cambio genético de una célula, que luego prolifera y da orígen a los tumores. Existen distintos tipos de cáncer infantil, los de mayor frecuencia son las leucemias, los que afectan al Sistema Nervioso Central y en tercer lugar los linfomas.
En esta fecha los oncólogos refuerzan la importancia de mantener al día los controles de salud infantil, concurriendo al establecimiento de salud según corresponda, resultando crucial que los padres estén informados acerca de esta patología.
En Chile el cáncer infantil es una patología Ges, por lo tanto tiene tiempos bien definidos para hacer el diagnóstico y para derivar a un centro de atención donde el niño o niña pueda ser tratado.
En Magallanes se notifican aproximadamente entre siete y diez casos nuevos al año.
Especialistas señalan que la tasa de curación del cáncer infantil en el territorio nacional es alentadora, alcanzando cerca del 80% de sobrevida a cinco años.
Si bien no hay un signo de alarma único claro, es importante estar atentos a síntomas como palidez, moretones o sangrado inexplicado, aumento de volumen en alguna parte del cuerpo (huesos o ganglios, por ejemplo), fiebre prolongada sin causa aparente, dolor de cabeza persistente o vómitos, entre otros.
La pesquisa temprana es clave para ofrecer un tratamiento adecuado y mejorar las probabilidades de curación y con ello la calidad de vida. Sin embargo, más allá de esta premisa, en zonas extremas como Magallanes, la lucha es mucho mayor, pues todavía hay pacientes que deben viajar fuera de la región para recibir un tratamiento oncológico, debido a la falta de especialistas, por lo que los esfuerzos deben estar orientados en esta línea, de acortar la brecha de profesionales en esta área, y de dotar de la tecnología adecuada para el tratamiento oportuno, considerando que el paso por el cáncer infantil suele ser una experiencia que marca de por vida a una persona.