Gendarmería frustra fuga de tres reclusos desde la cárcel local
En horas de la tarde de este domingo, las visitas al complejo penitenciario dePuna Arenas tuvieron que ser suspendidas sin previo aviso producto de una situación de emergencia: tres imputados se habían intentado fugar. El incidente activó todos los protocolos de Gendarmería para este tipo de situaciones, logrando controlar la situación en poco tiempo, frustrando el escape de los encarcelados en los primeros anillos de seguridad del penal de Avenida Circunvalación.
El módulo C1 corresponde al de internos imputados, que alberga a alrededor de 40 personas bajo rejas con llaves. Son 24 celdas, 12 por piso. En el ingreso al módulo hay puertas magnéticas, luego una reja de acceso y entonces se llega al hall, espacio común de los internos. A este módulo pertenecían los tres presos que intentaron escapar por sus propios medios, traspasando las líneas de seguridad del penal.
La emergencia fue reportada durante la tarde. Las primeras informaciones preliminares se conocieron a las 15,30 horas, dando cuenta que habían sido tres internos, que alcanzaron a llegar hasta el primer anillo de seguridad. En ese momento se indicó que no habían lesionados, pero que era un procedimiento en desarrollo aún, para esclarecer cómo sucedieron los hechos.
Conforme transcurría la tarde, fueron trascendiendo nuevos antecedentes. Los internos saltaron del patio de su módulo para llegar hasta la primera reja, de las cuatro que tiene el penal. En ese momento fueron divisados por la central de cámaras, activando las alarmas y procediendo con la detención de los internos en el momento.
Los tres imputados son reincidentes de mediano compromiso delictual. Uno de ellos, está en prisión por un delito de femicidio frustrado.
El director regional (s) de Gendarmería, Alejandro Meza Morales, confirmó que los hechos ocurrieron durante la tarde, mientras se realizaban actividades regulares. “Tres personas imputadas intentan vulnerar las medidas de seguridad, salen del módulo y en ese preciso momento se activa la alerta del circuito cerrado”, sostuvo.
Lo más destacable para Meza fue el rápido tiempo de reacción del personal. “No transcurrieron más de 2 minutos desde que los internos intentan burlar las medidas de seguridad hasta que el personal ingresa a la guardia interna, al lugar donde se encontraban estas personas que intentaron evadirse”.
Por otro lado, una vez que se produce un intento de fuga, los protocolos implican la realización de otras diligencias al interior del penal. “Personal de Gendarmería tiene que realizar un conteo general de la población general, se realiza este conteo y se encuentra toda la población penal en completa normalidad”, agrega el director de Gendarmería.
A raíz del intento de fuga, uno de los involucrados al momento de saltar, cayó y se golpeó el brazo, presentando una lesión. Personal de Gendarmería debió trasladarlo en la tarde de ayer hasta el Hospital Clínico para constatar sus lesiones.
El anterior intento fallido
En agosto del año pasado se reportó el último intento de fuga de la cárcel, protagonizado por tres chilenos y un dominicano la noche de un miércoles. Ellos pertenecían al Módulo E, de condenados reincidentes y para escapar cortaron barrotes de fierro macizo y rompieron ventanas para llegar hasta la malla perimetral. El exdirector de Gendarmería, Dan Toro, sostuvo en la ocasión que en 21 años de funcionamiento del penal, era la primera vez que personas condenadas logran salir al exterior y llegar a las mallas perimetrales.
En aquella ocasión fueron 11 disparos “persuasivos” percutados por los gendarmes con sus armas de servicio los que llevaron a deponer la actitud de los reclusos, quienes se entregaron de inmediato.
Dado el uso de sierras metálicas utilizadas para cortar los barrotes, encontradas en el allanamiento al interior de las celdas, la institución instruyó un sumario para evaluar si en el marco de estos hechos hubieron funcionarios que podrían haber constituido infracciones administrativas.