Reponen caldera en Escuela Puerto Harris; atiende a 42 alumnos
En un esfuerzo por fortalecer las condiciones de enseñanza en zonas aisladas, el Servicio Local de Educación Pública (Slep) llevó a cabo mejoras en la Escuela Puerto Harris, ubicada en Isla Dawson. A través de un proyecto de emergencia que superó los 55 millones de pesos, se repuso la caldera del establecimiento y se implementaron avances tecnológicos para el control de asistencia, con miras al inicio del año escolar 2025.
El establecimiento, que atiende a 42 estudiantes hijos de funcionarios de la Armada, opera en una de las zonas más remotas de la región, a cuatro horas de navegación desde Punta Arenas. Dadas las condiciones climáticas extremas de la zona, la reposición de la caldera se posiciona como una intervención clave para garantizar la calefacción y el bienestar de la comunidad educativa durante el invierno. Las bajas temperaturas, que pueden alcanzar cifras bajo cero, hacen que la calefacción continua sea indispensable para la realización de las actividades escolares diarias.
Las labores ejecutadas incluyeron la instalación de una nueva caldera, la mantención de bombas y filtros, la limpieza de radiadores y líneas de calefacción, así como la renovación parcial de la techumbre del edificio. Estas acciones se enmarcan en el plan de mantenimiento preventivo del Slep Magallanes, cuyo propósito es asegurar condiciones óptimas para el desarrollo del proceso educativo. La intervención responde a la urgencia de garantizar la operatividad de las instalaciones en un contexto donde las dificultades de acceso dificultan las reparaciones durante el año lectivo.
La profesora encargada Sofía Candia, valoró el impacto de las mejoras en la calidad de vida de la comunidad educativa, destacando que los trabajos permitirán a estudiantes y docentes desempeñar sus actividades en un ambiente seguro y confortable. La escuela, que imparte enseñanza desde el nivel de transición hasta octavo año básico, cumple un rol fundamental en la educación de niños y niñas que habitan en la zona, aportando al fortalecimiento de los lazos comunitarios en una localidad donde la Armada de Chile desempeña un papel protagónico.
Además de las mejoras en infraestructura, el plantel educacional recibió la instalación del último reloj biométrico de asistencia para colegios públicos de la región.