“Ahondando en la epopeya del fracaso”: a través de tecnología 3D buscan reconstruir la historia de la Ciudad del Rey Don Felipe
En 1584, el conquistador Pedro Sarmiento de Gamboa lideró la fundación de Ciudad del Rey Don Felipe con la intención de asegurar el dominio español sobre el estrecho de Magallanes. Sin embargo, la colonia fracasó debido a las duras condiciones climáticas y la escasez de recursos, lo que llevó a la muerte de casi todos sus habitantes.
Más de cuatro siglos después, un grupo de investigadores ha decidido examinar nuevamente este episodio desde una perspectiva interdisciplinaria, con el objetivo de obtener una visión más completa de lo que realmente sucedió en el lugar.
Un trabajo sin precedentes
La investigación, liderada por la historiadora Soledad González, es financiada por un Fondecyt y reúne a especialistas de diversas instituciones, entre ellas la Universidad Bernardo O’Higgins, la Universidad Austral y la Fundación Prisma Austral.
Lo innovador del estudio, titulado “Ahondando en la epopeya del fracaso: una aproximación multidisciplinaria a Ciudad del Rey Don Felipe”, radica en la sinergia entre disciplinas que rara vez trabajan juntas en terreno.
“Estamos dialogando y trabajando con especialistas de áreas muy distintas, que a menudo ni siquiera coinciden en trabajo de campo, como biólogos —en este caso, especializados en paleoecología— y filólogos hispánicos”, explica la historiadora González.
“Esa combinación de disciplinas que en principio parecerían ajenas entre sí ha sido una novedad y también el gran desafío de este proyecto”, destaca.
Metodología y primeros hallazgos
El equipo ha abordado el estudio del sitio desde múltiples ángulos, incluyendo el análisis de suelo para identificar incendios antiguos, la búsqueda de documentos históricos y la interpretación de manuscritos del siglo XVI.
“Cuando la gente llega a un lugar y quiere construir una ciudad, quema. Quema bosques, quema arbustos para despejar el terreno, y eso deja una huella en el medioambiente. Con los análisis de los paleoecólogos podemos determinar si hubo incendios y en qué época ocurrieron”, detalla la historiadora.
Paralelamente, la revisión de archivos en España ha revelado información clave sobre los materiales y provisiones que se embarcaron en la expedición en comparación con lo que realmente llegó al asentamiento.
“Nos hemos dado cuenta, por ejemplo, de que los registros de embarque abarcan tres tomos grandes, pero lo que efectivamente llegó al destino se redujo a diez hojas. En el camino se pueden ver todas las dificultades que enfrentaron”, señala González.
Un proyecto a largo plazo
La investigación, que actualmente se encuentra en su fase inicial, se extenderá hasta 2028. Durante este tiempo, los investigadores realizarán múltiples visitas a terreno y reuniones de coordinación para compartir avances y ajustar metodologías.
“La idea es que todos vayamos juntos al sitio, porque eso permite ver en directo el trabajo de cada especialista y preguntar sobre lo que está haciendo”, señala González.
Además, el proyecto contempla iniciativas de divulgación, como un documental que registrará los descubrimientos a lo largo de una década. Previamente, se escribió un libro que recoge parte de la historia: “Rey Don Felipe: más allá de la leyenda”.
Futuro digital
Uno de los objetivos a largo plazo es que los hallazgos contribuyan a la puesta en valor del sitio, permitiendo nuevas formas de acercamiento al público. Entre las opciones evaluadas se encuentra la reconstrucción en 3D del lugar, una tecnología que permitiría recrear digitalmente la ciudad en distintas épocas.
“La era digital nos permite apostar por reconstrucciones en 3D, donde el público pueda ‘estar’ en el sitio y experimentar cómo era en el siglo XVI o XVII. No es algo que podamos hacer directamente, pero dejaremos todo el material necesario para que alguien más pueda desarrollarlo”, comenta la investigadora.
Con este trabajo, los investigadores buscan esclarecer aspectos hasta ahora desconocidos de Puerto del Hambre y asegurar que su historia permanezca viva para las generaciones venideras.