Con una víctima ausente jueces condenaron por lesiones graves y no por femicidio frustrado

Un caso bastante singular se ventiló en tribunales, respecto de una mujer que fue acuchillada gravemente, pero que al comienzo del proceso judicial ella figuraba como imputada. Porque el hombre sufrió lesiones, pero que posteriormente se verificaron que se las había propinado la víctima en defensa propia.

Por eso al término del juicio la fiscal del caso, Johanna Irribarra, habló de una reparación por el sesgo y prejuicios que se dieron al comienzo con la denuncia de la víctima. Una mujer institucionalizada, en casas de acogida, y con problemas conductuales. Finalmente esto se pudo investigar con perspectiva de género. Dejando los prejuicios de lado.

José Villarroel Linco fue llevado a juicio por el delito de femicidio íntimo en contexto de violencia intrafamiliar, en carácter de frustrado. Pero los jueces recalificaron y lo condenaron ayer por lesiones graves.

La Fiscalía pide cumplimiento de pena efectiva. Mientras que la defensora, Karina Ulloa, apuesta por una pena en libertad. Esto se conocerá el próximo 4 de abril, a las 13 horas, cuando el tribunal entregue la sentencia.

La víctima no se presentó a entregar su testimonio en el juicio, pese a que la fiscal la tenía como principal testigo. Así que pidió al tribunal que la autorizaran a dar lectura a la declaración que la víctima entregó en la investigación. Lo que fue acogido.

Agresión

La agresión data del 26 de agosto de 2023. Ese día, a las 23 horas, José Villarroel agredió con un cuchillo a su entonces conviviente, en un domicilio de calle Pedro Bórquez. Una de las puñaladas iba directo al tórax de la mujer, pero logró esquivarla, terminando con un corte en el brazo derecho. Posteriormente, a eso de las tres de la mañana, el acusado, que estaba dispuesto a matarla, ingresó abruptamente al dormitorio donde se fue a resguardar. Pero el hombre rompió a patadas la puerta de ingreso. Una vez dentro comenzó a atacarla con golpes de puño en la cara, mientras le gritaba: “te voy a cortar la cara”, “te voy a abrir la cara”, “te voy a cortar la nariz” “te voy a sacar los ojos”, haciéndole gestos y ademanes amenazantes. “Te voy a matar”, le decía en reiteradas ocasiones mostrando el cuchillo que sostenía en sus manos. Pero no solo eso, sino que la golpeó y luego, con el cuchillo comenzó a apuñalarla en diferentes partes del cuerpo. Le provocó heridas en zonas vitales, recibiendo la víctima múltiples cortes.

Villarroel Linco se encuentra cumpliendo prisión desde el 20 de febrero del año pasado.