Resultados de encuesta Juventud y Bienestar alertan sobre malestar emocional en Magallanes
- El 28,6% siente que es un fracaso, 41,1% cree que no es bueno/a para nada y el 10,4% reporta dificultad para recibir cariño de parte de sus padres.
Un total de 1.483 estudiantes de segundo medio de 30 colegios de la Región de Magallanes participaron en la Encuesta de Juventud y Bienestar (EJB) 2024, instrumento aplicado por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda). Este estudio busca comprender cómo se sienten niños y adolescentes en relación con su bienestar general, emocional y entorno familiar, escolar y comunitario.
Entre los resultados más destacados en Magallanes, el 83,2% de los adolescentes se siente contento/a con su vida, mientras que el 82,1% declara sentirse feliz, mientras que un 61,8% afirma sentirse aparentemente fuerte y saludable.
Sin embargo, la encuesta también revela señales de malestar que deben ser abordadas. Por ejemplo, el 28,6% siente que es un fracaso, el 41,1% cree que no es bueno/a para nada, y el 37,1% se ha sentido triste casi todos los días durante la última semana. Además, el 10,4% reporta dificultad para recibir cariño de sus padres, y el 31% declara que les cuesta hablar de temas personales con sus padres.
En relación con el uso del tiempo libre, el 68,8% de los adolescentes pasa al menos tres horas al día en redes sociales, mientras que sólo el 28,3% realizó al menos una hora de ejercicio intenso cuatro a siete veces en la última semana. Por otro lado, un 59,7% dice sentirse entretenido/a con sus estudios, reflejando una conexión significativa con el ámbito escolar.
Golpe
Un dato preocupante es que el 22,8% de los encuestados ha dado un golpe a otra persona en el último año, lo que puede estar vinculado al manejo emocional y a las relaciones interpersonales dentro y fuera del establecimiento educativo.
La directora regional de Senda, Lorena Guala Vivar, destacó que los resultados de la encuesta son clave para el diseño y ajuste de planes preventivos en comunas y establecimientos. “Uno de los aspectos más valiosos es que los resultados están disponibles a nivel comunitario y por establecimiento educativo, lo que permite diseñar o ajustar planos preventivos propios”, indicó.
La directora también relevó la importancia del entorno en el bienestar juvenil: “La mayoría declara sentirse feliz y conforme con su vida, y buena parte se siente conectada con sus estudios. Sin embargo, estas percepciones conviven con datos que nos deben llamar la atención, como el malestar emocional, la baja autoestima o las dificultades para recibir o expresar cariño con personas adultas cercanas”.
En esa línea, enfatizó que los factores como el control parental, el vínculo afectivo y el acompañamiento adulto son modificables y pueden marcar la diferencia. “Cuando hay mayor involucramiento de madres, padres o cuidadores, los consumos bajan. Esto es algo que se puede trabajar y mejorar”, explicó, destacando programas como PrePARA2, Parentalidad Positiva. y las acciones del programa Senda Previene.
Más allá del consumo:
conocer cómo se sienten
La Encuesta de Juventud y Bienestar no está centrada en medir la prevalencia de consumo, como sí lo hace el Estudio Nacional de Drogas en Población Escolar. Su foco está en comprender el estado emocional y el contexto en que se desarrollan niñas, niños y adolescentes. Muestra cómo la presencia activa, respetuosa y afectiva de los adultos cuidadores reduce significativamente los riesgos asociados al consumo de alcohol y otras sustancias.
Para la directora del Injuv, Carla Cifuentes, esta encuesta constituye una herramienta clave para entender cómo viven, sienten y enfrentan los desafíos los jóvenes en Chile.




