“Yo prendí fuego porque me estafaron”, confesó hombre que intentó quemar local nocturno
Con arresto domiciliario total quedó la persona que el domingo fue detenida por Carabineros, tras protagonizar un incidente en el local nocturno Aquelarre, ubicado en Avenida España Nº1145, el que intentó quemar prendiendo fuego con un encendedor.
Francisco Pinto Sigonier estuvo compartiendo en ese local hasta altas horas de la madrugada del domingo. Al parecer, y según su versión, ese mediodía se percató de que lo habían estafado. Los cobros habrían excedido con creces los consumos. Al mediodía decidió volver al local. Era domingo y nadie le abrió. Entonces decidió ingresar a la fuerza, forzando con un fierro la chapa de la puerta.
“Una vez al interior caminó por un pasillo interior, procediendo a prender fuego con un encendedor, sobre el cielorraso y el papel de una ventana, para luego salir al exterior y provocar daños a una cámara de seguridad”, sostuvo el fiscal Cristián Opazo Aguilera, que lo formalizó este martes por los delitos de incendio de inmueble y daños.
Las personas que viven en dependencias aledañas llamaron a Carabineros. Al arribo la policía se encontró con un sujeto que estaba golpeando una cámara y confesó de inmediato que prendió fuego porque lo habían estafado.
El Laboratorio de Criminalística de Carabineros fijó fotográficamente el lugar, dejando constancia de los daños y acumulación de hollín en distintas partes del techo.
Mientras que el informe del Cuerpo de Bomberos confirmó la intencionalidad del incendio, de acuerdo al resultado de los peritajes.
Defensora
La defensora penal pública, María Isabel Godoy, se opuso a la prisión que pidió el fiscal, porque según la versión de su representado, y como consta en la carpeta de investigativa, “el incendio se habría ocasionado en un local comercial que estaba destinado a la realización de fiestas clandestinas o “after”, como comúnmente se les conoce”.
Este no fue un incendio con peligro para las personas, “porque mi defendido nunca pudo prever que vivían personas en el lugar, ya que estaba destinado a realizar fiestas clandestinas y, al momento de los hechos, en el lugar no se encontraba nadie”.
Además la defensora apeló a que su representado es una persona de 40 años, “que goza de irreprochable conducta anterior. Trabaja. Tiene un arraigo familiar sólido. Padre de tres hijos que estudian y, en ese sentido, es difícil poder considerar que su libertad constituye un peligro para la sociedad, circunstancia que el tribunal tuvo a la vista para desestimar la pretensión del Ministerio público de prisión preventiva y, en definitiva optó por imponerle la medida cautelar de arresto domiciliario total”, que fue la decisión adoptada por la jueza Paula Stange.