Por temor de ver a sus agresores víctima de violento robo declaró tras un biombo

En el marco del juicio oral que comenzó en contra de Andrés Ademir Raipán Sirón y José Luis Hernández Pérez, ambos acusados de protagonizar un violento robo a mano armada al interior de una vivienda ubicada a la altura del kilómetro 7 de la Ruta 9 Sur, ayer declaró la víctima y lo hizo tras un biombo por el temor que aún le tiene a sus agresores. No quiso verles la cara, pero sí pidió que se haga justicia por todo el sufrimiento que le provocó este asalto.

Fue el 2 de diciembre del año pasado, cerca de las una de la mañana, que los acusados, más un tercero, previamente concertados llegaron a bordo de un automóvil Nissan, modelo Precea hasta el domicilio de la víctima, sector de parcelas en Leñadura.

Rompieron el vidrió del dormitorio principal para ingresar, estando la víctima al interior, a quien amenazaron con armas de fuego. Una vez al interior lo golpearon con un fierro en la cabeza y en el cuerpo en reiteradas oportunidades.

Además lo amarraron con alambres y amenazaron con matarlo. Mientras lo seguían golpeando le robaron diversas joyas, entre otras especies, avaluadas en 8 millones de pesos aproximadamente, dándose posteriormente a la fuga.

El dueño de casa sufrió múltiples heridas contusas y cortantes en extremidades inferiores, superiores y en la cabeza.

La PDI logró ubicar el automóvil en que se desplazaban los delincuentes. Estaba en la casa de Raipán, encontrando en la habitación la pistola utilizada para el atraco, más cartuchos de bala. Además de 8 envoltorios de papel con marihuana. A un costado de la cama había una bolsa de nylon con cocaína y en un cajón otras 9 bolsas con la misma droga.

El fiscal jefe de Punta Arenas, Sebastián González Morales lidera el juicio en contra de los acusados, para quienes solicita 20 años de cárcel para cada uno como autores del delito consumado de robo con intimidación.

Sin embargo, para Andrés Raipán, que actualmente se encuentra en la cárcel de Valdivia, pide adicionalmente otras penas. Una de 5 años como autor del delito consumado de porte o tenencia ilegal de arma de fuego. Otra de 3 años por porte o tenencia ilegal de municiones. Más 3 años de presidio como autor del delito consumado de microtráfico. Y una tercera de 3 años de presidio como autor del delito consumado de receptación.

Para Raipán la totalidad de las penas que pide el fiscal suman 34 años de cárcel.