Europa construirá un avión hipersónico más veloz que el Concorde
Europa dio un paso clave en la carrera por conquistar el vuelo hipersónico con Invictus, un avión espacial reutilizable que busca unir la atmósfera y la órbita terrestre desde una pista convencional. Impulsado por la Agencia Espacial Europea (ESA) y la consultora británica Frazer-Nash, el proyecto apunta a realizar su primer vuelo en 2031.
El avión, que alcanzaría velocidades superiores a Mach 5, promete superar al histórico Concorde y competir con los prototipos en desarrollo por EE.UU. y China. Su diseño contempla el despegue horizontal, una aceleración hasta el límite de la atmósfera y su eventual inserción orbital, sin lanzamientos verticales.
El corazón del sistema será un motor de hidrógeno preenfriado, capaz de operar en condiciones extremas sin fundirse, gracias a tecnología derivada del fallido proyecto SABRE. El sistema permite enfriar el aire en milisegundos antes de ingresarlo al motor, reduciendo el estrés térmico a velocidades hipersónicas.
Con un presupuesto inicial de 9,4 millones de dólares, Invictus se perfila como una plataforma experimental modular, clave para ensayar tecnologías aeroespaciales avanzadas. El plan incluye pruebas a escala real y la colaboración con universidades y empresas privadas.
Además de sus aplicaciones en defensa y exploración espacial, el avión podría revolucionar los vuelos comerciales, reduciendo los tiempos intercontinentales a menos de una hora. Europa apuesta así a liderar un nuevo paradigma de movilidad global y acceso autónomo al espacio.




