Obispo Alejandro Goic fue hospitalizado anoche tras sufrir un infarto al miocardio
- El religioso magallánico está internado en la Clínica Isamédica de Rancagua, sin embargo, ante su delicado estado de salud, será derivado a la Clínica de la Universidad Católica.
El exarzobispo de Rancagua Alejandro Goic, de 80 años, sufrió un infarto al miocardio durante la noche de este viernes.
De acuerdo a la Diócesis de Rancagua, el sacerdote fue hospitalizado en la Unidad de Tratamientos Intensivos (Uti) en la Clínica Isamédica de Rancagua, pero, debido a su delicado estado de salud, será trasladado hasta la Clínica de la Universidad Católica durante las próximas horas.
A través de un comunicado, la Diócesis de Rancagua señaló que “ayer, viernes 3 de abril, cerca de las 21:00, Monseñor Alejandro Goic Karmelic (…) sufrió un infarto al miocardio, siendo trasladado a la Clínica Isamédica de Rancagua”.
“Rogamos su oración por quien fue obispo de Rancagua por 14 años”, cierra el texto.
“Salario mínimo ético”
Cabe recordar que el religioso magallánico alcanzó notoriedad cuando en el año 2007, ejerciendo la presidencia de la Conferencia Episcopal de Chile, propuso la idea de un “salario mínimo ético” (superior al ingreso mínimo) para las personas. Su propuesta fue rebatida por la entonces senadora Evelyn Matthei, quien señaló que el religioso “no tiene idea de economía”. Tras las declaraciones de la parlamentaria, el entonces presidente de la Conferencia Episcopal replicó que a pesar de no ser experto, sí conoce los problemas de los más pobres. ““No soy economista, pero en el contacto con la gente, percibo los dramas de los más pobres y me hago eco de sus sentimientos”, aseguró Goic, aclarando que su idea apelaba a “la conciencia cristiana para tener un país más justo”.
Acusación y renuncia
En sus últimos años de gestión, Goic fue vinculado a una presunta red de abusos en la Región de O’Higgins, sin embargo, el proceso judicial no prosperó y todos los supuestos involucrados terminaron sin condenas.
Su renuncia a la Diócesis de Rancagua fue aceptada por el propio Papa Francisco en medio de la crisis de la iglesia por abusos sexuales.
Posterior a su dimisión, Goic emitió una declaración pública, donde señaló que “yo me pregunto cada día si pude si-pese a las denuncias que dieron origen a los procesos canónicos, y en mi condición de testigo de estos tristes acontecimientos- pude hacer más”.
Asimismo, indicó que “las dolorosas circunstancias que vive la iglesia diocesana le imprimen un sabor amargo en este momento”. –
Agencias




