Apoderados denuncian graves hechos de violencia y abuso en la Escuela Pedro Sarmiento de Gamboa

• Acusan que el colegio no informó a las familias y que no activó los protocolos de protección a tiempo, pese a que los niños alertaron reiteradamente sobre la situación que se venía presentando.

Apoderados de la Escuela Pedro Sarmiento de Gamboa, emplazada en el sector Río de los Ciervos, presentaron denuncias ante distintas instancias, incluida la Superintendencia de Educación y el Servicio Local de Educación Pública, por una serie de hechos de violencia que afectan a estudiantes del establecimiento, incluyendo situaciones de connotación sexual que involucran, según la denuncia de los apoderados, a cinco alumnas.

Paulina Valderrama, presidenta del Centro de Padres de tercero básico, reclamó que desde hace tiempo habían advertido al establecimiento sobre situaciones preocupantes, sin que recibieran una respuesta adecuada. “Como apoderados hemos hecho diferentes denuncias. Con anterioridad habíamos dado aviso al colegio en reiteradas oportunidades de situaciones que se han ido generando en donde los niños han presenciado violencia física, violencia psicológica, agresiones físicas, malestares y distintas situaciones personales por parte de cada padre”, expresó.

Añadió que los propios niños habían informado al colegio de lo que estaba ocurriendo.

“Desde el colegio, nos dicen que se han activado los protocolos, pero ya la semana pasada, lunes 25, si no me equivoco, nos enteramos de una situación gravísima que tiene relación con una connotación sexual, en donde hay hechos graves. Hay por lo menos cinco niñas (del colegio) que han sido violentadas por un compañero, a lo cual también las niñas en su oportunidad habían dado aviso al colegio”.

Planteó que los apoderados no recibieron información oficial por parte del establecimiento y que se enteraron por otros medios. “Nosotros como apoderados nunca nos enteramos por parte del colegio, sino por nosotros mismos que nos fuimos entregando información de lo que nos estábamos enterando en su minuto”.

Tras conocer estos hechos, solicitaron reuniones y entregaron una carta formal con la denuncia respaldada por asesoría legal. “El viernes tuvimos una entrevista con la directora, el inspector y el encargado de convivencia escolar, porque entregamos una carta con una denuncia formal, legal, porque nos estamos haciendo asesorados por abogados. Pero la respuesta no fue la esperada. Si bien nos escucharon, aceptaron la carta, y dijeron que iban a activar los protocolos y que ellos recién se estaban dando por enterados de las situaciones que estaban ocurriendo”.

La representante de los apoderados criticó que no se informara de manera oportuna a las familias y que los testimonios de los niños no fueran tomados en cuenta. “Todas las versiones que los niños han ido entregando desde hace mucho tiempo no fueron escuchadas, ni solucionadas y, por sobre todas las cosas, no avisadas a los papás. O sea, el colegio tiene el deber de informar de forma inmediata cuando ellos se enteran de algo a los apoderados, cosa que no fue en su minuto. Nosotros nos enteramos por nosotros mismos. Y, este tema de la connotación sexual, yo creo que ya superó todos los límites”, enfatizó.

Las denuncias fueron ingresadas entre el jueves 28 de agosto y el lunes 1 de septiembre. “Ya hicimos las denuncias en el Slep, ante la Superintendencia de Educación, en la OPD y, con abogados también de manera independiente. Nos estamos asesorando y, de no tener respuestas positivas o resoluciones que sean favorables para la vulneración que están sufriendo los alumnos, vamos a tomar todas las acciones legales que correspondan… Según los asesoramientos obtenidos, desde el minuto uno en que el establecimiento se enteró de las situaciones se debería haber activado el Aula Segura, cosa que no sucedió. No se le dio informe tampoco a los apoderados de ninguna de las situaciones”.

Versión del Slep

El Servicio Local de Educación Pública tomó conocimiento de un supuesto abuso sexual que involucraría a dos estudiantes, menores de edad.

De inmediato, el área jurídica informó esta situación al Tribunal de Familia y solicitó medidas de protección para ambos estudiantes, las que fueron acogidas. Al mismo tiempo, orientó al colegio para recabar la mayor cantidad de antecedentes sobre esta situación.

Profesionales del área de convivencia del Slep están trabajando con el equipo directivo del establecimiento y se reunieron con apoderados del curso al que asisten los estudiantes involucrados para revisar las medidas adoptadas y definir un plan de intervención con la comunidad estudiantil.