“Durante mi primer proceso no tenía traductor y mi abogado no hablaba inglés. Fue una situación muy complicada y extraña”
El joven piloto estadounidense Ethan Guo arribó este sábado a Punta Arenas, luego de más de un mes en el continente blanco. Su estadía marcó el cierre de la etapa más extrema de su proyecto, que lo llevó a recorrer los siete continentes en un avión monomotor con la misión de recaudar fondos para la lucha global contra el cáncer.
Ethan Guo arribó a la capital regional a bordo del rompehielos “Almirante Viel”, tras un operativo logístico que comenzó en la Base Presidente Eduardo Frei, ubicada en el Territorio Antártico Chileno. Desde su llegada a Magallanes, expresó su gratitud hacia el personal militar y científico con quienes compartió durante semanas, destacando la hospitalidad recibida en uno de los lugares más aislados del planeta.
“Antártica fue una experiencia muy interesante, es la mejor forma de describirlo. Es un lugar diferente y único. Pasé el 90% de mi tiempo leyendo libros, algo que normalmente no puedo hacer porque siempre estoy ocupado trabajando. Aunque aprecié la paz y el silencio, mi libertad estuvo bastante limitada por las condiciones del lugar”, relató.
Durante su permanencia en la base, Ethan se integró a la rutina de quienes viven y trabajan allí, recibiendo muestras de afecto por parte de la comunidad chilena, como una camiseta de la selección nacional y otra de Colo-Colo. “Me trataron como familia. Han sido algunas de las mejores personas que he conocido y creo que el país puede estar orgulloso de ellos. Los chilenos de la Antártica representan a su nación de manera fantástica”, expresó emocionado.
Campaña global
y vínculo con Chile
El proyecto impulsado por Ethan Guo, a través de su fundación Cancer Fundraising, busca crear conciencia sobre la necesidad de colaboración internacional en la lucha contra el cáncer. “He estado en hospitales en cinco o seis continentes y he visitado más de 50 países. La lucha contra el cáncer es global y, para enfrentar un desafío de esta magnitud, necesitamos trabajar juntos”, señaló.
Como parte de esta campaña, el próximo martes en Santiago realizará una donación con el Hospital St. Jude, en coordinación con la Fundación Nuestros Hijos, institución chilena dedicada a la atención de niños con cáncer. Esta entrega se enmarca en un acuerdo alcanzado con el Ministerio Público. Su abogado en Chile, Jaime Barrientos, explicó que la recaudación será destinada directamente a este centro médico, que trabaja en red con hospitales de distintos países.
Barrientos agregó que la campaña de recaudación seguirá activa hasta que Ethan regrese a Estados Unidos, aunque el viaje mundial concluye en Chile. “La próxima semana Ethan hará efectiva la entrega de los fondos comprometidos, lo que permitirá cerrar esta etapa con un aporte concreto a la salud infantil en Chile”, puntualizó.
Críticas al proceso judicial
y a la desinformación
Ethan Guo también abordó la controversia generada por su llegada a la Antártica en pleno invierno austral, defendiendo que su decisión fue segura y responsable. “Tomé la mejor decisión posible en esa situación. He volado alrededor del mundo, conozco el clima y el terreno. Ese día las condiciones eran muy buenas, incluso mejores que en Chile o Argentina. Nadie resultó herido y todos estuvieron a salvo”, aseguró.
Sin embargo, el joven piloto cuestionó la forma en que se desarrollaron los procesos judiciales en su contra: “Durante mi primer proceso, mi primer defensor público no hablaba inglés y no tenía traductor… La situación en general fue rara. Pero, escuchen, al final del día, Chile ha sido fenomenal”, relató.
También criticó las declaraciones emitidas por autoridades durante la investigación. “El fiscal comenzó a opinar sobre la aeronave, pero él no es piloto. Es como si yo hablara de política chilena sin conocerla. Esa situación fue muy extraña y generó confusión”, dijo.
Guo sostiene que existe desinformación y narrativas falsas sobre su caso que, a su juicio, han afectado la percepción pública de lo ocurrido. “Con el tiempo, la verdadera historia saldrá a la luz”, afirmó, adelantando que compartirá esa información en sus redes sociales.
Magallanes, punto
estratégico y humano
El paso por la región de Magallanes no solo marcó el inicio y cierre de su travesía antártica, sino que también le permitió conocer la relevancia logística y humana de esta zona del país.
Punta Arenas, reconocida internacionalmente como la puerta de entrada a la Antártica, fue clave en la coordinación de su regreso. Antes de su arribo a la capital regional, Guo visitó Puerto Williams, en la provincia Antártica de Tierra del Fuego, donde pudo conocer la vida de la comunidad más austral del mundo y el rol que cumple la Armada en la conectividad del territorio. “Chile ha sido fenomenal conmigo. La gente es increíblemente amable, especialmente en esta región, donde dependen tanto unos de otros por las condiciones extremas. Estoy muy agradecido por todo el apoyo que recibí”, expresó.
Próximos pasos
Ethan Guo viajó a Santiago para concretar la entrega de la donación. Posteriormente, regresará a Estados Unidos para continuar con su campaña global. El martes tendrá una reunión con la Fundación Nuestros Hijos, que coincide con la visita de una delegación norteamericana del Hospital St. Jude, por lo que habrá un encuentro para realizar la donación.
Mientras tanto, su avión será trasladado por un piloto chileno a otra ciudad, posiblemente Buenos Aires o Lima, donde Guo podrá retomar los vuelos una vez que los trámites con la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) estén finalizados.
El joven adelantó que continuará compartiendo en sus redes sociales detalles de su experiencia en la región y en la Antártica. “Narrativas falsas solo pueden estar por un tiempo. Con el material que he reunido, pronto podrán conocer la verdadera historia de este viaje”, afirmó.
El recorrido de Ethan Guo, que unió continentes y tuvo a Magallanes como escenario final, representa no solo una hazaña aeronáutica, sino también un testimonio sobre los desafíos personales y judiciales que enfrentan quienes impulsan proyectos de alcance global desde el extremo sur del mundo.




