Umag lidera investigación en prevención de lesiones deportivas
La Universidad de Magallanes ha posicionado su Laboratorio de Análisis del Movimiento como referente en la investigación deportiva regional, desarrollando programas de prevención de lesiones que benefician directamente a deportistas locales de diversas disciplinas.
Sergio Cares, kinesiólogo y académico de la carrera de Kinesiología de la Universidad de Magallanes, lidera esta iniciativa que en los últimos tres años ha evaluado a deportistas de gimnasia rítmica, fútbol, básquetbol y hockey indoor, utilizando tecnología de última generación para identificar factores de riesgo de lesión.
Tecnología al servicio del deporte regional
El Laboratorio de Análisis del Movimiento del Centro de Desarrollo e Innovación (CDI) de la universidad cuenta con plataformas de fuerza, cámaras tridimensionales y bidimensionales que permiten realizar evaluaciones biomecánicas precisas. “Hemos tenido la suerte de ver otros lugares en Chile donde se evalúa a deportistas y no se asemejan mucho a lo que tenemos acá”, destaca Cares.
La primera investigación se realizó con gimnastas rítmicas hace dos o tres años, evaluando el control postural durante la ejecución de piruetas y comparando el rendimiento entre deportistas novatas y expertas. Los resultados fueron fundamentales para desarrollar estrategias de prevención específicas.
Posteriormente, el equipo amplió su trabajo hacia el fútbol y básquetbol, disciplinas que presentan similitudes en cuanto a gestos deportivos como cambios de dirección y desaceleración. “Evaluamos el control neuromuscular del movimiento en situaciones lo más cercanas a la realidad deportiva”, explica el investigador.
Compromiso con la comunidad deportiva
Lo que distingue este proyecto es su enfoque integral. En lugar de limitarse a entregar resultados, el equipo se ha comprometido a trabajar directamente con los deportistas, sus familias y entrenadores en programas de prevención.
“No solamente nos hemos quedado con la investigación para mostrar un dato importante, sino también darle continuidad”, señala Cares. Esta filosofía ha llevado a desarrollar reuniones educativas con el entorno del deportista, explicando los hallazgos sin generar alarma y enfocándose en la importancia de la prevención.
La realidad regional presenta desafíos particulares. Muchos jóvenes deportistas participan simultáneamente en múltiples equipos: colegio, universidad, club y selecciones locales, lo que genera una sobrecarga de entrenamiento que aumenta el riesgo de lesiones.
Formación profesional en acción
El programa también beneficia a los estudiantes de kinesiología, quienes desde segundo año aprenden a utilizar la tecnología del laboratorio, y en tercero ya la aplican como parte de su práctica profesional. “Es una ganancia para todos”, destaca Cares, quien valora especialmente el contacto temprano de los estudiantes con pacientes reales y deportistas de alto rendimiento.
Los estudiantes no solo aprenden a manejar equipos de alta tecnología, sino que desarrollan habilidades para trabajar con grupos de niños y adolescentes, una experiencia que enriquece significativamente su formación profesional.
Resultados medibles en camino
Actualmente, el equipo se encuentra en la fase de evaluación de la efectividad de sus programas de prevención. Tras un año de trabajo sistemático con diferentes grupos deportivos, planean realizar una reevaluación en enero de 2025 para medir objetivamente la reducción de factores de riesgo de lesión.
“Tenemos todo septiembre, octubre, noviembre y diciembre para trabajar con un programa de prevención mucho más objetivo y estructurado”, anticipa el investigador.
Ciencia abierta y proyección regional
Las tres investigaciones desarrolladas hasta la fecha están disponibles en Arca, el repositorio institucional de la Universidad de Magallanes, como parte de la política de ciencia abierta de la institución. Esta transparencia permite que otros profesionales y organizaciones deportivas accedan al conocimiento generado.
La comunidad deportiva regional ha comenzado a reconocer el valor de este trabajo. “Ya tenemos hartos deportes esperando poder incorporarse en este plan de prevención”, señala Cares, quien también se ha propuesto compartir los resultados con otras instituciones deportivas de la región.
Una visión integral del deporte
La experiencia ha enseñado al equipo investigador la importancia de no encerrarse en el laboratorio, sino de comprender la realidad completa del deportista. “Tu pregunta de investigación debe ser realmente un problema para ese entorno o para nuestro entorno regional”, reflexiona Cares.
Este enfoque ha permitido identificar necesidades reales y desarrollar soluciones pertinentes, convirtiendo a la Universidad de Magallanes en un referente en la aplicación práctica de la investigación científica al servicio del deporte y la salud de los jóvenes atletas de la región.
La iniciativa representa un ejemplo exitoso de cómo la academia puede contribuir directamente al bienestar de la comunidad, combinando rigor científico con compromiso social y formación profesional de calidad.




