“Es una decisión que tiene que ser técnica, pero también que vaya de forma amigable con los vecinos”
Esta semana se aceleraron los trabajos para habilitar la residencia para adolescentes del Servicio de Protección Especializada (SPE), luego del incendio en la casa de Kuzma Slavic y el paso por el albergue del Instituto Nacional del Deporte (IND), para finalmente llegar a un nuevo espacio en el sector sur de la ciudad. No obstante, con la llegada, vecinos han exigido el levantamiento de un muro para separar la residencia de las demás propiedades. Desde el Servicio de Protección indican que es una posibilidad que está en análisis.
En conversación con La Prensa Austral, la directora (s) del SPE Magallanes, Lorena Guala, señala que, a pesar de que sea de público conocimiento el paradero de los niños y niñas que residen en la casa siniestrada, como institución compartir ese dato implica “exponer a ellos a un riesgo”. Asegura que “hoy día tenemos un espacio seguro y en las condiciones de seguridad que se necesitan para poder estar bien”.
Inicialmente, este espacio sería habilitado con una licitación de cerca de $400 millones. Sin embargo, la emergencia del siniestro cambió la programación y se dispusieron los primeros elementos con fondos para este tipo de contingencias, así como con inmobiliario de la casa de Kuzma Slavic. “Teníamos una emergencia y había que resolverla, en esa situación se implementa un espacio como cualquier casa. Pero las condiciones de infraestructura, de arreglar la entrada, acceso, eso continúa de forma paralela en licitación para que se adjudique y puedan mejorar el espacio”, explica Guala.
En tanto, respecto de la casa siniestrada, Guala sostiene que los trabajos probablemente van a tomar algunos meses ya que “se dañó toda la parte del segundo piso, también el primer piso por el trabajo de bomberos, hay un deterioro en todo el sistema eléctrico”.
En ese sentido, la habilitación del nuevo espacio requirió fondos adicionales por el siniestro. “A pesar de que no está programado, nuestro servicio tiene recursos para poder comprar camas, inmobiliario que se pueda dañar o que pueda verse afectado por incendio. Hay algunas cosas que se pudieron recuperar de la otra residencia, que fueron trasladadas y así se habilitó”, sostiene la directora (s) del SPE.
El muro
Esta semana, al constatar de los movimientos en la cuadra y en las inmediaciones de la porpiedad adquirida por el gobierno regional, vecinos consultaron y se reunieron con el Servicio de Protección Especializada (SPE), solicitando la instalación de un muro que separe las casas de la cuadra de la residencia de la institución. “Hemos tenido un trabajo con los vecinos y hemos llegado en general a acuerdos, hemos estado conversando y tenemos buena acogida después de que uno intenciona o sensibiliza la importancia de la comunidad en el trabajo con los niños, niñas y adolescentes”, sostiene Guala.
Sin embargo, respecto de la solicitud de la construcción de un muro, aún no hay nada decidido. “Es una situación que estamos conversando con ellos”, comentó inicialmente la directora. “Es una decisión que tiene que ser técnica, pero también que vaya de forma amigable con los vecinos. La decisión pasa por el Servicio de Protección Especializada, conjugando estas dos cosas: “la parte técnica, pero también la parte de relaciones con los vecinos”. Para la directora, de todas formas, es un tema complejo en que “hay que transar, hay que negociar y quizás se puede también abordar de otra forma al incorporar a los vecinos”.
Para los vecinos del pasaje la Trinidad, al sur de Punta Arenas, el tema no está zanjado. Dado que el compromiso ha sido sólo verbal, enviaron cartas al gobernador regional, consejeros, seremis, alcalde y concejales. “Estamos votando para cerrar con candado y cadena a la mala el pasaje”, reconocen incluso algunos residentes.
A su vez, enviaron a este diario un audio de la directora regional del servicio dirigido a los vecinos con la postura sobre la petición: “Tenemos el compromiso de cerrar el muro completo de lado a lado, como ustedes querían, no como no habíamos tranzado”. El levantamiento del muro, depende de la habilitación de ingreso vehicular por Alessandri, el cual depende de obras en curso, por lo que Guala reitera: “Nos comprometemos efectivamente con el muro, de lado a lado, pasando por las entradas de vehículos y eso siempre con la salvedad de que tengamos la entrada por Alessandri”.
En la entrevista con el diario, Guala sostuvo que “nos interesa mucho poder tener buenas relaciones con los vecinos, porque también ellos, de alguna forma, nos pueden prevenir de situaciones que puedan estar pasando”. En esa línea, el foco sería “tejer redes comunitarias que sean mucho más humanizadas”.




