Trabajadores de atención primaria acusan que desvinculaciones han sido “sin reemplazos”, reduciendo las horas médicas

Un clima de inseguridad e incertidumbre ha tensionado al equipo de atención primaria que trabaja en el Centro de Salud Familiar (Cesfam) Mateo Bencur, establecimiento del que fueron desvinculados tres funcionarios de manera definitiva: un médico, una psicóloga y un enfermero por hacer uso de licencia médica para viajar fuera del país. La Asociación de Funcionarios de dicho establecimiento la define como una crisis que ha traído suspensión de controles y seguimientos terapéuticos.

Son tres casos que llegaron a sanción definitiva y la única vía de apelación sería a nivel de los tribunales de justicia. No obstante, existen más personas “que están esperando la notificación de la sanción”. Los funcionarios instaron a que los procesos sean transparentes, que los fiscales cumplan los requisitos y que, en estos casos puntuales, se “reponga el personal”.

El llamado lo hicieron llegar desde la Asociación de Funcionarios del Cesfam Mateo Bencur a través de un comunicado, donde relatan la “crisis operativa y humana sin precedentes” que atraviesa el establecimiento. “Estas desvinculaciones fueron ejecutadas de manera abrupta, sin reemplazos ni medidas de contingencia, generando una reducción inmediata de horas médicas y de salud mental, lo que ha impactado directamente en la continuidad de la atención de cientos de usuarios”.

La consecuencia directa de la aplicación de estas medidas, indican, es que “han debido suspenderse controles, seguimientos terapéuticos y atenciones de salud mental, afectando a niños, adultos mayores y personas con patologías crónicas o cuadros de vulnerabilidad emocional”. Los funcionarios identifican que la situación “compromete la oportunidad y calidad del servicio público que nuestro Cesfam entrega a la comunidad”.

A su vez, respaldan y aseguran que “los funcionarios destituidos contaban con licencias médicas debidamente emitidas por diagnósticos reales y acreditados, producto de afectaciones de salud física y mental derivadas del desgaste laboral sostenido”.

El llamado hacia las autoridades es a “intervenir con urgencia para garantizar la reposición del personal, la estabilidad del equipo y el resguardo del derecho a la atención oportuna y continua de la población”.

Desde los Consejos de Desarrollo de los establecimientos de salud primaria adhirieron al llamado de los funcionarios, e indicaron que “el impacto que implican estas decisiones, que no compartimos en algunos casos, repercute directamente en los usuarios, por lo que estamos en busca de respuestas que nos permitan recuperar la estabilidad que requerimos. Estamos conscientes del impacto en salud mental qué implican estas decisiones, no queremos lamentar consecuencias nefastas”.

Una de los tres profesionales con sanción definitiva del Cesfam Mateo Bencur 

Exdelegada Luz Bermúdez fue desvinculada de la
Cormupa por caso licencias y anuncia acciones legales

Dentro de los tres funcionarios desvinculados desde el Cesfam Mateo Bencur, consta un nombre conocido: Luz Bermúdez, exdelegada presidencial de Magallanes. Fue removida en su calidad de psicóloga, siendo una de los profesionales a quien se les confirmó la sanción de desvinculación por parte de su empleador, la Corporación Municipal de Punta Arenas (Cormupa). Al respecto, adelantó que emprenderá acciones legales.

 “Ayer se me notificó la destitución y dado que mi licencia no fue falsa, eso está demostrado, estuve en tratamiento, vamos a apelar ante la Corte de Apelaciones por el principio de la proporcionalidad”, indicó la psicóloga Bermúdez, en contacto con La Prensa Austral.

Resulta gravitante resaltar que la Asociación de Funcionarios del Cesfam Mateo Bencur también se pronunció sobre esta materia, rechazando “categóricamente cualquier insinuación de irregularidad respecto de dichas licencias”.

Bermúdez resalta que en su rol de psicóloga, “me preocupa que mis pacientes puedan continuar sus atenciones”, pese a indicar que “confío plenamente en el equipo del Cesfam Mateo Bencur”. En ese sentido, reconoce que “estos procesos están generando una sobrecarga”.