El foro local está de duelo con la partida de Mauricio Sandoval, uno de los grandes abogados que ejerció en Magallanes
Una gran congoja existe en el foro local por el deceso del abogado Mauricio Sandoval Romero. Un profesional reconocido por sus pares y amistades como una persona tremendamente generosa, trabajadora y con valores humanos muy claros.
Nació en Chillán, donde estudió la enseñanza básica y media. Luego, ingresó a la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile y, apenas egresó, se vino a trabajar a Punta Arenas, porque acá tenía un tío abogado.
“Estando él acá, viviendo apenas un mes, nos conocimos”, comentó la esposa María Jimena Gómez. Se casaron y cumplieron 30 años de matrimonio. Tuvieron dos hijos: Iván, periodista de 29 años; y Natalia, de 23 años, estudiante de medicina.
A Magallanes siempre ha venido gente, pero no todos se quedan. “Él cuando llegó vino para quedarse y construir. Y eso se le notó siempre. Porque trabajó en muchos proyectos y con mucha energía. La verdad es que él era muy dedicado. En ese sentido se daba y lo daba todo”, recordó.
Fue del Rotary Club; de la Masonería; y participó en el Hogar Ignazio Zibillo. Esto último fue un proyecto que lo motivó mucho porque eran temas relacionados con la niñez.
También participó por años en la Sociedad Escolar Alemana. “Ahí estuvo muy comprometido con el tema del desarrollo, de los valores y de todo lo que tenía que ver con la infraestructura. Realmente, él era muy fiel a los proyectos”.
Consulta cómo lo recordará, indicó: “El era un hombre muy perseverante, comprometido, leal, trabajador y que tenía sus metas y también sus valores muy claros. Era muy fiel a ellos”.
“Un gran abogado”
El expresidente del Colegio de Abogados de Magallanes, Ramón Ibáñez Álvarez, se mostró muy acongojado por la partida de su amigo personal.
“Hoy partió un gran abogado. Un gran amigo. Un integrante de mi familia. Fue conocido por su rigurosidad, respeto, orden, inteligencia e integridad como abogado. También como esposo, padre, hijo y amigo”, indicó.
“Dejó este mundo terrenal un grande. Una persona dueña del silencio y no esclavo de sus palabras. Tal vez de pocas palabras, pero las exactas. No tan solo en el momento, sino también a la persona indicada.
La responsabilidad, el respeto y el orden marcó su vida personal y profesional”, refirió.
“Sandocan -cómo le puse- nos mostró ser un súper héroe sin capa. Trabajando hasta último momento con su orden y pulcritud que lo caracterizó, luchando con su tenacidad y templanza hasta el último momento, dando vuelta cualquier pronóstico.
“Deja en la vida de mi familia un tremendo vacío. Muchas veces fue amigo, otras un papá y otras tantas un ejemplo”, señaló.
Ibáñez dijo que lo despedía con palabras llenas de aprecio y admiración. “Demostraste ser un profesional metódico y ordenado en todo lo que hiciste. Siempre enfrentando los retos con determinación y disciplina. Tu carácter de caballero y tu respeto hacia los demás son cualidades que te distinguieron, haciéndote un ser humano ejemplar”, dijo.
Mauricio Sandoval presidió el Colegio de Abogados y también fue abogado integrante de la Corte de Apelaciones de Punta Arenas.
Otra de las decenas de personas que llegaron ayer al velatorio, en la Sociedad de Instrucción Popular, en Avenida Colón Nº 956, fue la médica María Isabel Iduya. Dijo que fueron amigos por muchos años. “Estamos consternados y, aunque sabía de su enfermedad, este tipo de noticias siempre conmueven y afectan mucho. Mauricio fue realmente una persona buena y, en lo personal, me apoyó a mi y a mi familia. Realmente, deja la vara muy alta”.
El funeral será mañana, a partir de las 14,30 horas, partiendo luego al Cementerio Parque Cruz de Froward.




