Magallánico viaja a Santiago para preparar su debut en la Copa del Mundo de esgrima

El joven magallánico Benjamín Gallardo Ordoñez viaja hoy a Santiago para integrarse a los entrenamientos oficiales del Team Chile de esgrima con miras a la Copa del Mundo de Florete que se desarrollará entre el 13 y el 16 de noviembre en Lima, Perú.

A sus 15 años de edad, el alumno del Colegio Punta Arenas, deportista del Club de Esgrima Punta Arenas e integrante del programa Promesas Chile y del Team Chile, se convertirá en el primer magallánico en participar en una Copa del Mundo de esgrima, enfrentándose a los mejores tiradores del planeta en las categorías cadete (sub-19) y junior (sub-21).

Benjamín, quien en rigor es categoría sub-15, fue convocado inicialmente para competir en las pruebas individuales sub-19 y sub-21, pero durante los últimos días se ha abierto la posibilidad de que también integre el equipo nacional en la competencia por equipos, lo que daría aún mayor valor a su participación internacional.

En la capital entrenará diariamente en doble y triple jornada en el Centro de Entrenamiento Olímpico (Ceo) y en el Centro de Alto Rendimiento (Car) bajo la dirección del coach nacional Felipe Alvear, destacado ex esgrimista chileno y medallista panamericano en los Juegos de Río de Janeiro 2007 y Guadalajara 2011.

De esta manera, el magallánico será uno de los cuatro representantes chilenos en la categoría masculina de florete, integrando oficialmente el Team Chile que competirá en Lima.

LESIÓN Y RETORNO

Benjamín tuvo días atrás un positivo reencuentro con las pistas durante el torneo binacional amistoso Chile – Argentina en el Polideportivo 18 de Septiembre, donde participaron tiradores entre 13 y 21 años.

El seleccionado nacional se quedó con la medalla de oro tras imponerse en una intensa final por 10-8, resultado que confirma su buen nivel competitivo y completa recuperación de la lesión que sufrió hace apenas un par de semanas. Una fractura en el dedo meñique de la mano derecha, su mano hábil, durante una sesión de entrenamiento.

Gracias al trabajo conjunto de su equipo multidisciplinario del programa Promesas Chile y del Club de Esgrima Punta Arenas, la recuperación se ha desarrollado dentro de los plazos previstos, permitiéndole retomar la competencia con normalidad.

“Fue un golpe duro, pero me lo tomé con calma. Sabía que con el trabajo del equipo médico y mi entrenador iba a salir adelante”, comentó Benjamín, enfatizando que “competir (en el reciente torneo binacional) me dio mucha confianza”.

“Necesitaba sentirme otra vez en la pista. Ahora estoy enfocado y con muchas ganas de seguir entrenando para llegar en mi mejor nivel a la Copa del Mundo”, complementó.

GRAN MOTIVACIÓN

Asimismo, reconoció su entusiasmo ante la posibilidad de participar por primera vez en una prueba por equipos, tanto a nivel nacional como internacional. “Nunca he competido en modalidad por equipos y sería una experiencia totalmente nueva. Me motiva mucho poder hacerlo junto a mis compañeros del Team Chile. Sé que será un desafío grande, pero estoy preparado y con la ilusión de representar a Magallanes y a mi país de la mejor manera”.

La participación de Benjamín en la Copa del Mundo no sólo consolida su proyección como uno de los talentos jóvenes más destacados del país, sino que también simboliza el esfuerzo y la perseverancia de una generación de deportistas que, desde el extremo sur, están demostrando que el alto rendimiento también se construye desde Magallanes.

“ES UN SUEÑO HECHO REALIDAD”

Esfuerzo, compromiso, familia y convicción se conjugan como piedra angular para que Benjamín Gallardo cumpla sus sueños.

Un dato no menor es que entrena seis días a la semana, combinando sus estudios con extensas jornadas de preparación técnica y física, ya sea bajo la atenta mirada del equipo multidisciplinario del programa Promesas Chile; con su maestro Eduardo Rodríguez en Punta Arenas o con el coach nacional de florete, el profesor Felipe Alvear, en Santiago. “También cuento con el apoyo del club Máscara de Hierro y la profesora Andrea, que siempre me reciben muy bien”, apunta el esgrimista magallánico, quien dice haber encontrado en el Club de Esgrima Punta Arenas “ mi zona de confort; una familia que me apoya y que me enseña cada día”.

LA FAMILIA

El entorno, a todas luces, es un factor preponderante para codearse con el éxito. “Esto tiene mucho que ver con mi familia, que siempre está conmigo, y con el apoyo del colegio, que ha entendido mis ausencias cuando debo viajar por competencias”, complementa el joven floretista.

En cuanto a su objetivo en la cita mundialista, Benjamín aspira a “demostrar todo lo que he entrenado y disfrutar la experiencia. Ser el primer magallánico en llegar a una Copa del Mundo de esgrima es un sueño hecho realidad y espero que inspire a otros jóvenes”.