Presidente compara el Plan de Zonas Extremas con el Puerto Libre y promete un nuevo salto para Magallanes

El Presidente Gabriel Boric Font afirmó que aspira a que el nuevo Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas (Pedze) sea recordado en el futuro “como hoy se recuerda el Puerto Libre”, destacándolo como un hito histórico para Magallanes y un punto de inflexión en la relación del Estado con los territorios aislados. Así lo señaló durante la firma del decreto que oficializa esta política pública permanente, ceremonia realizada en la sede de la junta de vecinos Nelda Panicucci, al sur de Punta Arenas.

El Mandatario subrayó que esta iniciativa “rompe definitivamente con la idea de que por estar lejos estamos abandonados” y que permitirá “mejorar la calidad de vida de los magallánicos con infraestructura significativa y visión de futuro”.

Boric destacó que el Pedze pone fin a la discrecionalidad política y corrige un criterio que históricamente perjudicó a zonas con baja población: las evaluaciones de proyectos centradas en la rentabilidad social. “¿Quién determina qué es rentable para un pueblo que hace soberanía en los rincones más australes de la patria? Nos rebelamos contra esa lógica”, afirmó.

La firma del decreto viene a cerrar un compromiso presidencial adquirido con sus coterráneos en su primera visita como Mandatario, en mayo de 2022.

El plan contempla una inversión de $2,4 billones y establece un horizonte de ejecución de diez años, con una evaluación intermedia al cabo de cinco año para verificar avances, pertinencia e impacto real de las medidas implementadas.

En total, se pretenden financiar 105 iniciativas. Entre ellas destacan el proyecto para la resolución de listas de espera médica por más de $10 mil millones; cuatro nuevos establecimientos educacionales; tres Centros de Salud Familiar; cientos de kilómetros de carreteras y sendas de penetración; el Centro Aeroespacial de Magallanes; y la renovación de todos los aeropuertos de la región, entre otras obras.

A este plan se incorporan las iniciativas aún pendientes del Plan Excepcional de Desarrollo de Zonas Extremas, como el Centro Antártico Internacional; los últimos kilómetros de la senda de penetración Hollemberg-Río Pérez; la Biblioteca y Archivo Regional; la solución portuaria en Natales; y la última etapa del muelle multipropósito de Puerto Williams.

Según el gobernador regional Jorge Flies, con esta cartera de proyectos Magallanes se acerca cada día más a convertirse en “una región de ciencia mundial, una región de energía para el mundo, una región conectada a Chile y al mundo”.

Magallanes se convirtió en la primera región extrema del país en hacer uso de esta política tras más de cuatro meses de intensas negociaciones con la Subsecretaría de Desarrollo Regional, la Dirección de Presupuestos y el Gobierno Regional de Magallanes. Este instrumento dejará de depender de la discrecionalidad del gobierno de turno y pasará a ser una política pública del Estado destinada a los territorios ubicados a más de mil 500 kilómetros de Santiago.

La firma se realizó en la junta de vecinos Nelda Panicucci, lugar donde el Presidente fue recibido por las dirigentas de la población cerca de las diez de la mañana. La ceremonia duró más de una hora y contó con la presencia de la mayoría de las autoridades regionales, encabezadas por el delegado presidencial José Ruiz Pivcevic. Los grandes ausentes fueron los consejeros de oposición y el alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich.

Durante la actividad intervino Marta Triñanes, presidenta de la junta de vecinos, quien celebró que, gracias a este plan, su barrio contará en un par de años con un nuevo consultorio y un colegio. “Cuando el Estado y la comunidad se unen, cuando el desarrollo se hace cercano y humano, los sueños dejan de ser sueños y se convierten en realidad”, afirmó.