Adaptación y conocimiento: los ejes de la gestión hídrica para Magallanes
Cada aniversario de la Dirección General de Aguas del Ministerio de Obras Públicas nos ofrece una oportunidad para reflexionar sobre el valor del agua y la importancia del trabajo de esta institución y de quienes la conforman. Cumplen un rol esencial administrando, regulando y protegiendo el agua en las cuencas de nuestro país, garantizando un uso sostenible y equitativo, y promoviendo una gestión integrada.
A lo largo de los años, la DGA ha fortalecido su quehacer mediante la generación de información y el desarrollo de una gestión cada vez más integrada y transparente. Detrás de cada concesión de un derecho de aprovechamiento de aguas, de las estaciones hidrométricas, de las fiscalizaciones, de los estudios y de cada acto administrativo, hay un equipo comprometido de funcionarias y funcionarios que aportan significativamente con conocimiento técnico y dedicación diaria. En este día particularmente, reconozco el esfuerzo colectivo y reafirmamos la importancia de continuar fortaleciendo la seguridad hídrica en nuestro territorio, promoviendo la gobernanza y la gestión integrada del agua.
Frente al cambio climático, nuestra región enfrenta desafíos vinculados con la protección de los ecosistemas prístinos, la inversión en infraestructura hídrica y la adaptación a los efectos del cambio climático, que ya se han hecho visibles en años anteriores con dos decretos de escasez en 2022 y 2023, debido a la notable disminución de las lluvias y otros fenómenos meteorológicos.
En respuesta, hemos avanzado particularmente en la cuenca Costera Seno Andrew y Río Hollemberg, ubicada en la provincia de Última Esperanza, que incluye las comunas de Natales y Torres del Paine. Actualmente, se desarrolla un estudio que se encuentra en su etapa técnica final y que servirá de insumo para la elaboración del Plan Estratégico de Recursos Hídricos de la Cuenca (PERHC), el cual tentativamente estará disponible para consulta pública a principios de 2026. Este instrumento de gestión a nivel local permite identificar brechas para alcanzar la seguridad hídrica en consumo humano, preservación ecosistémica, actividades productivas y resiliencia frente a los efectos adversos del cambio climático, proponiendo medidas y acciones concretas para cumplir dicho objetivo.
Este estudio está vinculado a la Mesa Estratégica de Recursos Hídricos (MERH), destacando el trabajo colaborativo y el compromiso de quienes la conforman, con participación de diversos rubros, incluyendo el sector público, privado, organizaciones no gubernamentales, usuarias y usuarios del agua. Sus opiniones y experiencias han sido fundamentales para abordar de manera integral y efectiva los desafíos a los que nos enfrentamos, contribuyendo a una mejor gobernanza del agua, ya que todos los actores participan activamente en la planificación hídrica.
Por otra parte, hemos avanzado en el monitoreo de las aguas subterráneas, cuyos registros permitirán identificar variaciones de descenso y recuperación de los niveles freáticos, manteniendo un control del estado de los acuíferos en términos de sustentabilidad. Ampliamos la red piezométrica: en 2022 contábamos con 6 pozos de monitoreo; en 2024 sumamos 7 pozos más, y actualmente se construyen 10 adicionales, cerrando así el año con un total de 23. La proyección al 2027 es contar con una red piezométrica robusta y representativa, con 35 pozos en total.
Tenemos una ruta trazada: fortalecer la red hidrométrica regional con más estaciones piezométricas para contar con información más completa y precisa, que nos permita planificar y gestionar adecuadamente el agua subterránea. No debemos olvidar que la región ya cuenta con dos sectores hidrogeológicos de aprovechamiento común (SHAC) con declaración de área de restricción —Estancia Calafate y Puerto Bories— y dos SHAC con zona de prohibición —Punta Arenas y Río Calafate—. Ambas son herramientas que utiliza la DGA para proteger la sustentabilidad de los acuíferos cuando la disponibilidad de agua se ve amenazada.
La sequía estructural que vive el país, que en nuestra región se traduce en menores precipitaciones y, por lo tanto, menor caudal en los ríos, nos obliga a seguir avanzando con las MERH como instancias de gobernanza desde las cuencas y los PERHC como instrumento de gestión integrada de recursos hídricos, ampliando su alcance hacia otras cuencas de la región. El objetivo es contar con una planificación hídrica integral que permita anticiparnos a escenarios de escasez.
Que este aniversario N° 56 de la DGA sea un recordatorio de que, más allá de la gestión institucional, proteger el agua es un desafío que debe involucrar a todas y todos. Seguiremos construyendo, desde la evidencia técnica y la colaboración, una gestión hídrica que asegure el agua como bien público esencial para el consumo humano, los ecosistemas y el desarrollo productivo sustentable de la región.




