Después de 25 años, estudiantes de Puerto Edén realizaron histórica salida pedagógica por la región

La travesía comenzó con una navegación de 30 horas para llegar a Puerto Natales, primer destino de una salida pedagógica que no se realizaba desde hace más de dos décadas. Desde allí, los seis estudiantes de la Escuela Profesor Miguel Montecinos de Puerto Edén, acompañados por su profesora encargada, docentes, asistentes de la educación, apoderados y el único estudiante del Jardín Infantil Centollita, continuaron hacia Torres del Paine y posteriormente a Punta Arenas. Para muchos, fue el primer contacto con espacios urbanos y paisajes que hasta ahora solo conocían por relatos.

La profesora encargada, Ruth Angel, expresó que la idea nació al inicio del año escolar: “Esto partió en la primera reunión de apoderados, que también era mi primera reunión conociendo a los padres, y nació esto de poder salir de Puerto Edén. Ellos me comentaban que no salían hace más de 25 años los niños como escuela, y de ahí comenzó esta logística con apoyo de la comunidad”.

Destacó además la relevancia que tuvo para los estudiantes recorrer entornos completamente nuevos: “Ha sido interesante poder caminar en el cemento, jugar con las piedras, cosas que para los demás es muy normal, para nosotros no. No sé, vamos a ir a caminar a la Costanera, que puedan tomarse un helado, cosas que son muy simple para los que hemos vivido en la ciudad, pero en la isla es otra realidad”.

En Punta Arenas, el grupo visitó el Slep Magallanes, donde conocieron las distintas unidades del servicio mediante actividades preparadas especialmente para ellos. La jornada culminó con una sorpresa que marcó profundamente a la comunidad educativa: cada estudiante recibió un computador Chromebook para apoyar sus procesos de aprendizaje y permitirles acceder a herramientas tecnológicas actualizadas.

Alison Almonacid Maripichul, estudiante de quinto básico, expresó su emoción al recibir el dispositivo: “Muy lindo, no me esperé eso, lloré. Es muy emocionante porque nosotros a veces tenemos que ocupar otros computadores que son para trabajos de las tías y no podemos, por ejemplo, a veces utilizarlos porque se ocupan mucho”. El presidente del Centro de Estudiantes, Matías Rueda Bustos, también valoró el obsequio: “Nos regalaron una computadora que se convierte en tablet, es mi primera vez con una de estas, así que estoy muy feliz”.

El recorrido cerró dos semanas de experiencias significativas para una de las comunidades educativas más aisladas de la región, que vivió un hito largamente anhelado y construido con el esfuerzo conjunto de familias, docentes y estudiantes.