Conquistar al votante de Parisi y Bianchi: la misión del comando de Jara en Magallanes
La abanderada oficialista sólo logró 33 mil votos en la zona, votación distante a la obtenida por el gobernador oficialista
Jorge Flies o la coalición desde el Frente Amplio a la Democracia Cristiana en las municipales y regionales 2024.
Marcos Sepúlveda Loyola
La candidata de la izquierda, Jeannette Jara, logró el pasado domingo una victoria agridulce en la elección presidencial. Si bien la militante comunista obtuvo la mayoría de los votos, un 26,8% a nivel nacional, y pasó a segunda vuelta con el republicano de derecha conservadora José Antonio Kast (23,9%), enfrenta un escenario muy complejo de aquí al 14 de diciembre, cuando se celebre el balotaje.
Lo difícil para la exministra del Trabajo de Gabriel Boric tiene que ver con números: por la derecha competían otros dos abanderados, el Nacional-Libertario Johannes Kaiser (13,9%), de la ultraderecha, y Evelyn Matthei, de la centroderecha (12,46%), quienes junto a Kast suman poco más del 50% y ya han anunciado que se unirán en el desempate.
Jara no sólo obtuvo menos votación de lo que, en promedio, proyectaban las encuestas, que la situaban en un 28%. Tampoco logró llegar a lo que se esperaba fuera su piso, vinculado al 30% de apoyo de los fieles adherentes a Boric. Su mejor escenario, anhelado y necesario para aspirar a un buen desempeño en segunda vuelta, era al menos acercarse al 38% que, en septiembre de 2022, apoyó en un plebiscito el proyecto de nueva Constitución fallido que propuso la izquierda, pero quedó más de 10 puntos por debajo de aquel porcentaje.
Según la fundadora del Latinobarómetro Mori, Marta Lagos, “no existen los votos, creo que ese barco ya zarpó”. La encuestadora, de tendencia política más centrista, indica que Jara debe centrarse en disminuir la distancia que presenta con José Antonio Kast. “No le tiene que dar un 60% de los votos al gobernante elegido”, precisa. Lagos añade que un 60/40 en contra de Jara podría provocar un desbalance en los controles que ejerza la oposición, ya que va a quedar “con poco poder y no va a poder producir los controles y balances que requiere el sistema democrático”.
“La meta de Jara es salir por delante con una buena votación en segunda vuelta, mostrándonos que hay dos lados y no solo uno”, explica. Una de las primeras encuestas postelectorales fue la realizada por la Universidad del Desarrollo, que asegura que Kast ganaría con un 61% frente al 39% de Jara. Black & White indica que un 56% votaría por el abanderado republicano, mientras que sólo un 35% lo haría por la carta del oficialismo. Aún existiría un 9% de indecisos.
¿Cómo crecer en Magallanes?
En Magallanes, los encargados de hacer crecer a Jara en votación son el gobernador regional, Jorge Flies, y la diputada frenteamplista Javiera Morales. Según fuentes al interior del comando, ya comenzaron las primeras coordinaciones y, en los próximos días, se irán definiendo temas más logísticos, como las actividades que se realizarán y si es que Jara visitará Magallanes.
Al ser consultada sobre cuál será la estrategia del comando para crecer en votación a nivel regional, la diputada Javiera Morales aseguró que se deben ir a buscar los votos de Parisi, Matthei y, a nivel parlamentario, los de Carlos Bianchi. Sobre un potencial gesto de este diputado magallánico con el comando de Jara, la parlamentaria indicó que “todas las voces suman”.
La abanderada oficialista en Magallanes sacó 33.619 votos (28,89%). En Punta Arenas obtuvo 26.552 votos; 4.940 en Natales; mientras que en Porvenir sacó 1.209 sufragios. En las capitales provinciales de Última Esperanza y Tierra del Fuego superó el 30%.
Estos números están lejanos a los obtenidos en las pasadas elecciones a gobernador regional por Jorge Flies, principal figura del oficialismo en Magallanes, quien sacó 39.170 votos. También es distante al volumen de votación obtenido por los partidos políticos desde el Frente Amplio a la Democracia Cristiana en las elecciones para concejales y consejeros regionales. En ambas instancias, la coalición superó los 41.000 sufragios.
La votación de Jara en Magallanes sólo fue superior a la obtenida por el oficialismo a nivel parlamentario, donde 24.088 personas sufragaron por ellos.
Si a nivel nacional el desafío es llegar al votante Parisi, en Magallanes deberá también salir a convencer a parte de las 24.954 personas que eligieron a Carlos Bianchi como diputado por la región.
Llegar al votante Parisi
El gran desafío de Jara será conquistar al votante de Franco Parisi. El outsider obtuvo el tercer lugar a nivel nacional con el 19%. Según encuestas, el votante Parisi no tiene experiencia previa en política, pertenece al segmento socioeconómico C3 -ingreso promedio de $899 mil pesos-, el 53% completó su enseñanza media y tiene entre 31 y 40 años.
Rodrigo Espinoza, analista de la Universidad Diego Portales, considera que replicar la estrategia utilizada por Gabriel Boric en 2021, cuando el voto de Parisi fue dirimente, no es aplicable, ya que las condiciones del juego cambiaron: ahora existe votación obligatoria, mientras que Boric fue elegido con voto voluntario.
Conquistar al votante Parisi tampoco será tarea fácil, ya que en su mayoría desaprueba la gestión del Presidente Boric. Espinoza reconoce que conquistar el voto en regiones, principalmente en el norte, será clave, y añade que más de un tercio de los votantes de Parisi podría anular.
“Su estrategia de campaña comete el error de estar muy enfocada en los sectores urbanos de la Región Metropolitana”, señala sobre la estrategia de Jara en primera vuelta.
Espinoza añade que debe ir a disputar el porcentaje de exconcertacionistas que votaron por Evelyn Matthei. “Probablemente no le alcance, así que lo tiene bien cuesta arriba”, reconoce.
El factor anticomunista
Marta Lagos asegura que el principal dilema que enfrenta Jara es “ser comunista”. “Kast y Kaiser lograron activar ese anticomunismo que era muy pequeño”, asegura. Según la encuestadora, ese anticomunismo hace que “Jara saque 475 mil votos menos que su coalición parlamentaria”.
“¿Quién va a votar por una persona que quiere la victoria del proletariado, suprimir la propiedad privada? Todas cosas que nadie propuso, pero que bueno, se instalan. Y, por lo tanto, ella queda, digamos, pintada con esta cosa que era el comunismo de la época de la Guerra Fría, cosa que ella no es”, agrega.




