Exmilitares de Arica, Antofagasta, Santiago y San Carlos rindieron homenaje a la Cantinera del Ejército

A un año de su inauguración, el monolito ubicado en Avenida Bulnes con Manantiales recibió a delegaciones de exmilitares que se reunieron en Magallanes para desarrollar diversas actividades durante la semana. En este último acto se conmemoró el Día Nacional de la Cantinera del Ejército de Chile, instancia en la que destacó la presencia de Ana Olivares Cepeda, precursora de la ley que reconoce y pone en valor el trabajo de estas mujeres durante la Guerra del Pacífico, labor que, según señaló, había sido “omitida por más de 140 años”.

Olivares integra desde 2014 la agrupación Los Viejos Estandartes de Antofagasta, año en que inició su investigación sobre la figura de la mujer cantinera. “Se les llamó así porque se encontraban en la cantina, el espacio logístico encargado de la distribución y almacenamiento del agua, papelería y alimentación. Se les asignó ese lugar debido a la insistencia de las mujeres en participar del conflicto, pero como estaban prohibidas en el campo de batalla, muchas vistieron como hombres y fueron soldados. Al ser descubiertas, se les autorizó a desempeñarse como cantineras, aunque su labor fue mucho más amplia”, explicó.

El acto contó con la presencia de exmilitares de Arica, Antofagasta, Santiago y San Carlos, además de los veteranos del 78, quienes estuvieron en la zona cuando casi se produjo la guerra con Argentina. Uno de ellos es Alfonso Núñez Ibarra, presidente de la Agrupación Recreacionista General de Brigada Francisco Barceló Bravo, quien asistió junto a su nieto de 10 años, Lucas Alfonso Núñez Galdames, que lució el uniforme de los soldados chilenos en la Guerra del Pacífico. Oriundo de Curicó, Núñez llegó a la región movilizado desde el Regimiento Andalién de Cauquenes y decidió quedarse en Magallanes. “Esperamos estar vivos para los cincuenta años del conflicto del Beagle, y principalmente espero que se mantenga la paz con nuestros hermanos argentinos”, señaló. Agregó que ha sido acompañado por su nieto desde que este tenía solo tres años. “Para mí es muy satisfactorio, porque también ha estado presente siempre su hermano, que tiene 16 años. Que ellos me sigan es reconfortante, porque la juventud no se interioriza en la historia, no quiere participar, y que ellos me acompañen me llena de orgullo”, reiteró.

La presencia de estas delegaciones fue posible gracias a la Fundación Huellas Magallánicas, cuyo presidente, Carlos Burnes Torres, mencionó que durante la semana “participaron en una actividad en el Regimiento Pudeto y asistieron a una romería al cementerio”.

Finalmente, el comandante en jefe de la Quinta División del Ejército, general de Brigada Ricardo Merino González, destacó que, además de este reconocimiento, “estamos conmemorando los 41 años desde la firma del Tratado de Paz y Amistad que puso término al conflicto del Beagle y que mantiene la paz que debe existir entre ambas naciones”. En ese sentido, subrayó: “Tenemos muy buenas relaciones con nuestros vecinos de Argentina, especialmente con la Decimoprimera Brigada Mecanizada; mantenemos acuerdos de reuniones bilaterales y encuentros internacionales”.