Judikis entra a la carrera por la rectoría de la Umag y denuncia clima de “dolor, desánimo y tensión”

• El expresidente de la Asociación de Académicos y Académicas de esta universidad develó un ambiente de “incertidumbre, despidos y precariedad”.

Elia Simeone R.

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“Nuestra universidad es más grande que su crisis, más grande que cualquier gobernanza y más grande que nuestros miedos”.

Así lo expone Juan Carlos Judikis Preller en una carta abierta a sus pares de la Universidad de Magallanes, en la cual plantea que la comunidad universitaria está atravesando tiempos difíciles, marcados por “incertidumbre, despidos, precariedad y una conducción que han llevado a una toma y han generado dolor, desánimo y tensión”.

Con este planteamiento de fondo, el Dr. Judikis anunció su decisión de disputarle la rectoría de la Umag a José Maripani para el período 2026-2030, inscribiendo su candidatura cuando se abra el proceso respectivo.

El paso dado por Judikis Preller se da en un escenario marcado por tensiones internas, ajustes financieros y controversias sobre gobernanza, y una universidad que está “tomada” por los estudiantes, medida de protesta que sólo se levantó este fin de semana a fin de que el recinto fuera usado como centro de votación para la segunda vuelta presidencial.

La misiva, que Judikis solicitó sin éxito que fuera distribuida a través del correo institucional de la Umag, fue difundida de manera directa por el académico, quien cuenta con más de 32 años de trayectoria en la casa de estudios. En ella, llama a reconstruir la confianza, el diálogo y la ética institucional.

Cabe recordar que Judikis fue recientemente excluido del Consejo Superior, pese a haber sido el académico más votado, situación que generó cuestionamientos públicos y un debate sobre transparencia y correcta interpretación del marco normativo universitario. En su momento, esta exclusión fue denunciada como una señal de crisis institucional, aunque posteriormente la Corte de Apelaciones rechazó un recurso de protección que impugnaba la conformación de dos ternas vinculadas al proceso, validando así el procedimiento seguido por la universidad.

Este episodio judicial se inserta en un proceso más amplio de ajuste financiero impulsado por la actual administración, que ha implicado la desvinculación de varios profesores y profesoras. Entre ellos se cuenta Margarita Makuc, quien fue contendora de Maripani en la elección anterior, además de otros académicos que, según distintas voces internas, estarían vinculados a sectores críticos de la actual gestión.

Competirá contra Maripani

En una entrevista concedida a este medio, el actual rector José Maripani anunció el 17 de agosto pasado su intención de ser reelegido. “He sacrificado mi vida para que esta universidad funcione”, dijo en esa oportunidad, detallando los pilares de su propuesta y abordando la crisis financiera de la Umag, la cual tiene a la casa de estudios superiores bajo la lupa de la Superintendencia de Educación Superior.

En su carta, Judikis evita referencias directas a personas, pero es explícito en su diagnóstico institucional. Señala que, cuando la autoridad se distancia de su deber, “quien paga las consecuencias es la comunidad entera”.

Frente a ello, propone un liderazgo basado en la escucha, la transparencia, la justicia interna y la reconstrucción de la confianza como base para superar la crisis. “Hoy quiero decirlo con claridad y esperanza: esta universidad puede recuperarse y vamos a recuperarla juntos”, señala.

El expresidente de la Asociación de Académicos y Académicas de la Umag subraya que su proyecto rectoral se encuentra en una etapa inicial y que será construido de manera participativa, convocando a conversaciones abiertas con los distintos estamentos. “Nuestra universidad merece más de una mirada y más de una solución frente a la gravedad de la situación que vivimos”, afirma en la misiva.

Con esta declaración pública, Judikis se instala como una figura central en el debate que comienza a abrirse al interior de la Umag de cara al próximo proceso eleccionario, en un escenario donde la gobernanza, la transparencia y el impacto del ajuste institucional se perfilan como ejes clave de la discusión universitaria y regional.

“Les invito a reconstruir sin temor la confianza y a recuperar la libertad para ejercer el espíritu crítico que nos permitirá hacer realidad aquellos principios y valores que orientan nuestro quehacer universitario. La reflexión compartida, el diálogo honesto y la colaboración transversal son el punto de partida para proyectar una universidad más justa, sostenible, pertinente y humana, a la altura de los desafíos y los mejores destinos de nuestra querida Región”, instó.

Cerró su carta asegurando que seguirá abriendo espacios de conversación, de escucha y de encuentro. “Creo profundamente que las mejores ideas nacen cuando caminamos juntos”, sentenció.