Murió Arsenio Pérez Villar, el bombero más antiguo de Punta Arenas; fue dueño de la zapatería Winnipeg
A los 95 años dejó de existir Arsenio Pérez Villar, destacado ciudadano de Punta Arenas, a la que llegó con apenas 6 años desde España. En septiembre del año pasado recibió una distinción por sus 71 años en la Quinta Compañía de Bomberos. Presidió, además, a la Sociedad Española de Magallanes y fue un destacado dirigente deportivo, en el Club Chile y Español.
Aunque muchos lo recordarán por haber sido dueño de la zapatería Winnipeg, en calle Bories, la misma que dejó en 2012 y que vio cómo en 2021 cerraba sus cortinas para siempre. En este rubro se desempeñó, primero, en la tienda Surco, donde permaneció 22 años. Continuó su labor en la Fábricas Asociadas de Calzados, Fac, en la que fue supervisor de la zona sur-austral, desde Temuco a Magallanes.
A principios de los años 70 comenzó su propio negocio con el recordado hombre de radio Alfonso “Cocho” Cárcamo, con quien formó Percam Limitada, hasta que en 1973 se instaló con su propia zapatería, a la que bautizó como Winnipeg, nombre de la embarcación que en 1939 trasladó a más de dos mil españoles desde Francia, que huían de la Guerra Civil Española. Sin embargo, su compañero por más de cincuenta años en este negocio, Dinaldo Alvarado, apuntó que en ese lugar funcionaba una lavandería con ese nombre, el cual decidió mantener en el nuevo giro comercial.
“Con Arsenio trabajamos como una familia, porque además, su esposa Flora Mayor, era la cajera. Eran tiempos en que había filas de gente esperando comprar y fue uno de los pocos negocios con crédito directo, tanto es así que muchas familias fueron heredando el crédito y fueron comprando zapatos para los hijos y los nietos. Después llegó a trabajar Roberto Catalán, que también estuvo muchos años. Siempre llegaban muchos amigos a conversar, era otra época. Pero cuando se trabajaba, se trabajaba”, enfatizó Alvarado.
Ese espíritu familiar hacía que “cada 2 de noviembre, para el aniversario de la zapatería, organizaba un asado y nos iba a buscar a la casa. Hacía unos asados espectaculares”, recordó Alvarado, junto con otros momentos menos felices, como el aluvión de 2012.
Justamente, Arsenio Pérez permaneció al mando de Winnipeg hasta ese año, y desde entonces, continuó ligado a las actividades de la Sociedad Española, el Club Pesca y Caza y el Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas. La tienda cerró sus puertas en 2021 y como apunta Dinaldo Alvarado, “dejé de verlo tan seguido. Hasta ese año siempre pasaba a saludar. Pero desde que cerramos, lo habré visto tres o cuatro veces. Hace unos meses lo vi, pero estaba muy deteriorado, aunque es lógico, porque tenía 95 años”, finalizó.




