Paine, falencias y oportunidades

Respondiendo a la solicitud de las diferentes asociaciones gremiales que representan a la industria del turismo, el gobierno acaba de anunciar un nuevo plan con una agresiva inversión destinado a crear condiciones para reactivar la actividad turística en el país. 

Magallanes tiene en el turismo a uno de los pilares de su economía y, al igual que el resto de Chile, todas las empresas y pequeños emprendimientos ligados a este servicio resultaron fuertemente impactados por la pandemia, desde que tempranamente ésta provocara en marzo el cierre anticipado de la temporada de cruceros y ya en abril, con la cuarentena, prácticamente el cese de toda actividad ligada a este rubro. 

En la región el Parque Nacional Torres del Paine sigue siendo el principal atractivo, y su reapertura gradual a fines del año pasado permitió que algunas empresas y operadores turísticos pudieran retomar su funcionamiento, pero a un nivel muy reducido. 

Actualmente sólo un par de hoteles están operando en el interior de esta reserva natural y la mayor parte de los visitantes que acuden a él son turistas nacionales y de nuestra región.

Pese a la importancia de este parque, se observa que falta aún desarrollar diversos proyectos que permitan mejorar las condiciones viales dentro del mismo. Si bien se aprecia que varios tramos ya cuentan con pavimento y asfalto restan amplias zonas por mejorar y , a la vez, se observa que urge reparar varios kilómetros que resultan peligrosos por la cantidad de baches y condiciones irregulares en el camino. 

Si bien “la Octava Maravilla” representa un fuerte atractivo turístico para los extranjeros y, ciertamente, muchos hoteles y circuitos están pensados para los turistas foráneos que tienen mayor capacidad económica, también sería deseable que varios de estos servicios  pensaran en los magallánicos teniendo ofertas que sean accesibles, económicamente hablando. 

Quizás el embate de la pandemia pueda ser una oportunidad que haga repensar a algunos empresarios hoteleros que también resulta necesario el flujo turístico nacional y regional, el cual puede ser sostenido durante gran parte del año.