La hipotermia, un peligro a considerar
La fuerza que posee el frío con su manifestación de bajas temperaturas, fuertes nevadas y precipitaciones de agua-nieve puede llevar a una situación bastante delicada para la salud de las personas y sobre todo después de estar en algunos casos en confinamiento obligado por normas sanitarias, como han sido las cuarentenas. Está claro que a todos nos resulta diferente y divertido disfrutar con la nieve, pero es importante ser precavido porque es un momento en que la movilidad está muy reducida, sólo se puede circular con elementos como clavos y cadenas en los neumáticos de autos y no es sencillo acudir a unas urgencias ya de por sí están colapsadas con la pandemia. En una situación como esta, todos los ciudadanos tenemos que aportar nuestro granito de responsabilidad para evitar percances, especialmente entre los grupos más vulnerables como niños o mayores. Una de las principales afecciones provenientes del frío es el enfriamiento y la posterior hipotermia. Existen diferentes estadios de la hipotermia y esta se va agravando si no eliminamos la pérdida de calor. De esta forma se clasifica en: leve, moderada, severa y profunda.
El 50% de los casos de hipotermia severa son letales. La muerte por hipotermia generalmente es el resultado de una fibrilación ventricular cardiaca. En general, el principal tratamiento para la hipotermia es eliminar el mecanismo de daño que, en este caso, es la pérdida de calor. Para esto debemos saber que hay diferentes formas de ganar calor: hacer actividad física, temblar, alimentarnos, hidratarnos, la contracción de los vasos sanguíneos y aislarnos del medio externo. Algunas importantes indicaciones para el público en general en estos tiempos, que a través de las redes sociales se puede percibir como están ansiosos de que caiga nieve y las familias puedan salir a divertirse. En primer lugar cualquier salida sea en invierno o épocas estivales (primavera-verano) hay que planificar con tiempo aunque sean salidas cortas por el día, revisar las condiciones meteorológicas previamente y la proyección, tener el vestuario adecuado, fundamentalmente en la proyección de los pies, manos y cabeza. Si no se cumplen estas premisas pasan a ser inmediatamente factores que exponen a las personas a que puedan caer en hipotermia, ropa
inadecuada, agotamiento, estar tenso, mala alimentación, consumo de alcohol, estar deshidratado, entre otros. Hay que evitar al máximo tal situación.
Mientras hacemos algún desplazamiento que implique un esfuerzo físico, una de las fuentes de pérdida de calor más importantes es la evaporación del sudor por lo que debemos evitar la transpiración usando ropa adecuadamente ventilada para así prevenir una pérdida excesiva de calor. Las personas que estén en condiciones de salud debilitada o lesiones físicas hacen a las personas más susceptibles a la hipotermia. Al mismo tiempo evitar el enfriamiento por la humedad, si nuestra ropa se moja, se recomienda cambiar rápidamente antes de entrar en estado del frío. Evitar también exponerse a fuertes vientos que son muy recurrentes en nuestra región. Todas estas recomendaciones muchas veces pasan a ser vitales, el mismo desplazamiento en las rutas regionales en estas condiciones, es muy peligrosa, y se deben tomar los resguardos. No sólo los aviones deben hacer sus planes de vuelo ante una revisión minuciosa del tiempo atmosférico, sino también automovilistas, nuestras distancias son grandes y la atención primaria y asistencias de ambulancias y para colocar al resguardo a los accidentados es muy demorosa y muchas veces los resultados de un accidente carretero se puede agravar por la exposición a las bajas temperaturas.