Desde el sur vamos a cambiar el mundo
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oy nos encontramos en un proceso de revolución energética en Magallanes, principalmente con la llegada de empresas que generarán hidrógeno verde, aprovechando las condiciones naturales de nuestra región. Es así que como la única universidad pública de la región queremos transformarnos en un puente entre la comunidad y las empresas, de forma tal que cuando la comunidad quiera obtener información confiable acudan a la Universidad de Magallanes y en especial a su Facultad de Ingeniería.
Por otro lado, queremos ser ese puente bidireccional que comunique a la empresa con la sociedad, ser el semillero donde se formen los profesionales que trabajarán en esta revolución. Para eso queremos escuchar también a la empresa, conocernos y generar lazos de confianza.
¿Cómo dialogar de una revolución tecnológica?, pensamos que la primera forma de acercarnos a un diálogo es a través del conocimiento, tanto del conocimiento mutuo entre los distintos actores, como del conocimiento técnico básico para entender los fines y objetivos buscados en los procesos y los principios involucrados.
Por eso la primera invitación a todos es a dejar los prejuicios afuera. Escuchémonos y dialoguemos, tratemos de explicar en palabras sencillas nuestros procesos y abramos nuestra curiosidad a la obtención de nuevo conocimiento. Participemos, conversemos y planteemos todas nuestras dudas desde el respeto mutuo.
Magallanes está hoy en el centro de una posible revolución mundial, nos nombran desde el extranjero como una región con los más altos potenciales para liderar este cambio. Pero para que este cambio afecte positivamente la vida de todos, debemos generar conocimiento, profesionales, una comunidad empoderada, que entiende que desde su tierra se están produciendo soluciones reales para un problema global, pero que a la vez que defiende su naturaleza única. En mi opinión si lo hacemos todos bien, quizás Magallanes sea un ejemplo del tan soñado desarrollo sustentable.
Pero pongamos contexto a esta revolución. Hoy estamos en medio del cambio climático, se dice que somos la primera generación que sentirá los cambios en el planeta y la última que puede hacer algo. Este es un llamado sin duda urgente.
El problema es que toda nuestra vida se basa en la quema de combustibles, las grandes empresas queman combustibles para producir lo que nosotros consumimos. Nosotros al ir al mall, tomar colectivo, encender el computador, cargar el teléfono, estamos utilizando energía, la gran parte de ella obtenida a partir de la quema de algo.
Es aquí donde el hidrógeno se vuelve interesante, ya que es un vector energético, es decir que tiene la capacidad de almacenar mucha energía. Pero para producirlo, se requiere energía, si esa energía viene de fuentes renovables entonces estamos frente al hidrógeno verde, el que podemos usar como combustible directamente y no produce dióxido de carbono.
Este es el desafío que podría salvar a nuestro planeta y Magallanes puede transformarse en un gran productor de combustibles carbono neutrales. Hoy, como nunca, podemos estar en el centro de la solución, por lo que la invitación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Magallanes, es a aprender, conocer y aprovechar esta oportunidad única en beneficio de todos. Porque desde el sur vamos a cambiar el mundo.